En nombre del Grupo Parlamentario por los Derechos de las Mujeres de la Asamblea Nacional del Ecuador, hago manifiesta nuestra ingente sorpresa al haber dado lectura el día de ayer, domingo 31 de julio de 2016, a las declaraciones que hiciere el arzobispo peruano, Juan Luis Cipriani, sobre la violencia sexual contra niñas, adolescentes y mujeres; asertos dignos de firme y absoluto rechazo.
Resulta totalmente penoso que un hombre llamado por su rol dentro de la iglesia católica, a propugnar el respeto entre seres humanos, emita, por lo contrario, criterios cargados de misoginia y una total miopía respecto del grave problema social que constituye la violencia contra la mujer en todas sus formas, al aseverar que “muchas veces la mujer se pone como en un escaparate, provocando”, para evidentemente justificar uno de los más atroces actos que un hombre puede ejercer sobre una mujer.
Expresiones como la mencionada, dan cuenta de la infinita ignorancia del señor arzobispo, por decir lo menos, quien sin lugar a dudas desconoce el sinnúmero de acciones que la comunidad internacional ha emprendido para erradicar el fenómeno de la violencia de género que tantas vidas, tantos sueños, tanta paz ha arrebatado a millones de mujeres en el mundo; pues quienes sí practicamos el respeto y amor al prójimo, como mandan las escrituras que, asimismo, paradójicamente, pareciera que el representante de la iglesia católica en Lima desconoce, creemos y luchamos no ahora, sino desde hace décadas, por lograr una respuesta institucional y sobretodo social mucho más intensa frente a este gravísimo fenómeno, lo cual no nos lleva sino a condenar la falta de conciencia del arzobispo evidenciada a la hora de referirse a esta problemática.
Lamentamos que el hermano pueblo peruano, especialmente sus niñas, adolescentes y mujeres, tengan a la cabeza de su iglesia a un hombre sumido en la raíz de un machismo que para muchos, incluido él, es cultura, pretendiendo normalizar con sus declaraciones en toda una sociedad a la violencia de género, que no es justificable en ningún aspecto y bajo ninguna circunstancia. Esta posición aparentemente revestida de preocupación, al sentar el arzobispo como “una tarea importante” prevenir con educación la violencia, no es sino la más cruda manifestación del profundo y preocupante machismo que lo habita y, desde luego, de un inaceptable respaldo al abuso y la agresión.
Es paradójico y no menos preocupante, que mientras en la capital peruana, en menos de dos semanas, se avecina una marcha para concienciar a la población sobre lo que comporta la violencia doméstica y de género, Juan Luís Cipriani, haga un llamado a las mujeres ¡a no provocar! Insólito e inaceptable. Tan inaceptable, como el comunicado que hiciera la Iglesia Católica, que en franco congraciamiento con Cipriani, busca “aminorar” el justo impacto que en las redes tuvieron sus declaraciones, puesto que, afortunadamente, con las luchas feministas por concienciar sobre lo pernicioso de la violencia de género y lograr su erradicación, es que hoy por hoy ya no se invisibiliza la violencia y tenemos una sociedad más crítica, que identifica el machismo y no admite más acciones al respecto que no sean las que propugnan la reivindicación de los derechos de las mujeres. Evidentemente, el arzobispo no forma parte de esos valiosos y valientes seres humanos.
Por ende, hacemos un llamado a la Iglesia Católica, para tomar acciones sobre las declaraciones emitidas que, como se ha dicho, justifican la violencia y la instamos, además a realizar una acción tan simple como escuchar las palabras que el sumo pontífice dirigió al pueblo de Albania hace pocos días, con las que denunció el uso de la religión como pretexto para justificar la violencia y que estamos seguros, el arzobispo Cipriani y la Iglesia Católica con su comunicado, jamás las han escuchado y por lo cual nos permitimos citarlas para su conocimiento y necesaria y urgente comprensión: "QUE NADIE PIENSE QUE PUEDE ESCUDARSE EN DIOS CUANDO PROYECTA Y REALIZA ACTOS DE VIOLENCIA Y ABUSOS. QUE NADIE TOME LA RELIGIÓN COMO PRETEXTO PARA LAS PROPIAS ACCIONES CONTRARIAS A LA DIGNIDAD DEL HOMBRE Y SUS DERECHOS FUNDAMENTALES."
#NiUnaMenos #PorUnaVidaLibreDeViolencia
Gina Godoy Andrade, Asambleísta por el Guayas. Distrito 1 Feminista, luchadora permanente por la igualdad de género, la niñez y la adolescencia Asambleísta desde 2009. Integrante de la Comisión de Justicia y Estructura del Estado.
