Esta mañana y parte de la tarde, el Pleno de la Asamblea Nacional analizó en primer debate, los libros dos, tres y cuatro del Código Orgánico Administrativo. En el Libro II se aclaran los mecanismos para brindar una atención ágil al ciudadano en las instituciones y entidades del Estado. “En la Constitución se establecen las competencias de cada nivel de gobierno y se maneja un proceso claro de descentralización con responsabilidades del Estado, con un proceso de desconcentración desde el Gobierno Central. Existen mecanismos ágiles para la actuación del Estado, pero está pendiente el procedimiento para aplicar las competencias y servicios públicos que brinda el Estado. Por lo que es vital aprobar este Código Administrativo. No pueden existir diferentes normas”, dijo el asambleísta Richard calderón.
Con respecto al silencio administrativo, se aclaró que el ciudadano debe tener la garantía de atención en un tiempo establecido. Se habló de la importancia de unificar la norma, para evitar la dispersión y garantizar la seguridad jurídica para que se respeten los derechos y obligaciones de los ciudadanos.
Un Estado moderno
María Augusta Calle, aseguró que este código es fundamental para dejarlo en este periodo administrativo. “Tenemos la oportunidad de tener un Estado moderno, que responda al mandato constitucional”, dijo. Sin embargo, hizo hincapié en que se usa terminología penal y dijo que dentro del ámbito administrativo, que tiene siglos de vigencia, existe un lenguaje establecido, usado por legislaciones de diversos países, por lo que pidió revisarlo.
“Este código trata de evitar la discrecionalidad y dar procedimientos homogéneos, pero existen áreas que deben tener procedimientos especiales, como las Fuerzas Armadas y Policía Nacional, que no pueden ser parte de este código, sino deben manejarse con un Régimen Especial”, explicó María Augusta Calle.
Para la legisladora Marisol Peñafiel, hay procedimientos tortuosos que no cumplen con el principio de eficiencia en los gobiernos locales. Según dijo, no existe inmediatez, por eso la necesidad de unificar los procedimientos. “La eficiencia garantiza la seguridad jurídica. El gran problema del derecho administrativo ecuatoriano es la dispersión de normas. Es por esto que resulta imprescindible tomar la decisión y sistematizar las normas dispersas”, concluyó.
Mariangel Muñoz dejó claro que con el código se regula la relación entre los ciudadanos y la administración pública, sobre todas las funciones del Estado y aseguró que el debate ha sido importante dentro de la Asamblea, porque se recibieron las observaciones de distintos sectores, inclusive los de oposición.
MC
