Con la presencia del colectivo Deudores de Buena Fe, el Pleno de la Asamblea Nacional inició el segundo debate del proyecto urgente, sobre la restructuración de deudas de la banca pública, cerrada y gestión del sistema financiero nacional y régimen de valores, que según Virgilio Hernández, ponente del informe y presidente de la Comisión de Régimen Económico, permite a miles de personas honrar sus obligaciones.
El Parlamentario dijo que, para tal efecto se amplían los plazos para que estas personas cumplan sus obligaciones pendientes de pago. Se incorpora a todos los deudores de la banca cerrada para el recálculo, así como a los de la cartera cerrada de la Corporación Financiera Nacional, que no pudieron cumplir los convenios de recálculo. Se establece el plazo de 90 días para presentar nuevos documentos probatorios y hacer el recálculo.
Además, se autoriza al Banco Central la venta de la cartera a una compañía de servicios auxiliares de cobranza, de mayoría accionaria pública, para la gestión de la cartera de la banca cerrada. Se condonan las costas, gastos, recargos, intereses e intereses de mora de las operaciones de crédito otorgadas a personas naturales y jurídicas, que mantienen obligaciones con el Banco de Fomento en liquidación, siempre que los deudores paguen al menos el 5% del saldo de capital, dentro de 180 días.
Señaló que la propuesta deja sin efecto la suspensión de los beneficios concedidos por la Ley Orgánica para el Cierre de la Crisis Bancaria de 1999, a los deudores que, habiendo suscrito convenios de recálculo hubieren incumplido dos pagos consecutivos. Estos deudores tendrán 90 días para solicitar al Banco Central, la modificación del convenio de recálculo. Los que no hubieren suscrito convenios, tendrán 90 días para solicitarlo y 120 días para suscribir el beneficio, que podrá contener opciones de fraccionamiento de la operación y de sus garantías, previa autorización de la entidad financiera respectiva, explicó.
Informó que el plazo para el pago de créditos, de origen hipotecario, por parte de los deudores, será hasta 12 años, con un año de gracia. Se suspenden los procesos coactivos iniciados y los juicios de insolvencia, así como las medidas cautelares, que se hayan dictado, por 120 días, durante los cuales los deudores que deseen suscribir convenios de pago a la reactivación de sus convenios de recálculo o modificación de los plazos de pago, podrán requerir la suscripción de los documentos respectivos para la aplicación.
También accederán a los recálculos, los deudores vinculados, cuyo capital inicial del total de sus operaciones vinculadas acumuladas fuere de hasta 25 mil dólares. Luego de la modificación del racálculo del crédito, los deudores podrán solicitar la devolución y liberación de los bienes embargados, así como el exceso de garantías que superen el 200% del valor de recálculo, siempre y cuando existan varios bienes o éstos sean susceptibles de divisibilidad. Para el efecto, se requiere de un informe emitido por un perito calificado por la Superintendencia de Bancos.
Las deudas registradas en la contabilidad del BNF en liquidación, de hasta 40 mil dólares, que correspondan a créditos adquiridos por personas naturales, en sociedad conyugal, en la que uno de los cónyuges ha fallecido o padece de enfermedades catastróficas y raras o tiene discapacidad, debidamente certificada por la institución estatal correspondiente, por una sola vez, quedan extinguidas.
Además, se modifica la paridad de las Unidades de Valor Constante (UVC) para recalcular los créditos otorgados en UVC, de tres a un dólar.
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