En el marco de la conmemoración del Día Mundial de los Refugiados, la primera Vicepresidenta de la Asamblea Nacional, Viviana Bonilla, resaltó que los refugiados contribuyen con su trabajo al desarrollo del país, al recordar que Ecuador es el país de América Latina que más refugiados recibe, quienes son integrados a la sociedad y no viven en campamentos.
“Hoy estamos rindiendo homenaje a los más de 65 millones de personas que están en calidad de refugiados en el mundo”, subrayó. De esa cifra, el 70 % corresponde a mujeres, las cuales junto a niños, niñas y adolescentes tienen que trasladarse a otros países en búsqueda de seguridad para sus familias.
En la reunión se destacó los derechos y garantías que reconoce la Constitución del Ecuador para las personas en movilidad humana y las acciones que realiza la administración pública para atender los requerimientos de este sector social. Recibimos mensualmente 500 solicitudes de refugio, agregó.
Entre tanto, María Clara Martin, representante de la Agencia de Naciones para los Refugiados (Acnur) en Ecuador, agradeció el rol que desempeña la Asamblea Nacional y su compromiso con los refugiados. Como dijo nuestro Alto Comisionado, Filippo Grandi: “tenemos que hacer mucho más y mejor para los refugiados”, enfatizó.
La Ley de Movilidad Humana dictada en Ecuador es una muestra del apoyo que da la Legislatura a los refugiados, a fin de garantizarles condiciones de vida de seguridad y dignidad, comentó Martin.
De su lado, Daniela Pérez Obando, compartió su testimonio de vida en calidad de refugiada. “Hoy es el Día Mundial de los Refugiados, hoy celebramos el progreso que hemos decidido emprender aquellos que dejamos el pasado atrás. Refugiado es una persona que por motivos de seguridad sale de su país y no puede volver a él”, recalcó.
Doris Soliz, presidenta de la Comisión de Soberanía, Relaciones Internacionales y Seguridad Integral, aseguró que en el tema de los refugiados no solo hay que mirar los efectos, sino fundamentalmente sus causas. Es, en realidad, un problema de carácter humanitario y todos tenemos que buscar las mejores soluciones.
En el caso ecuatoriano, desde la promulgación de la Constitución de 2008 los ciudadanos en movilidad gozan de los mismos derechos de los connacionales, nuestro país propugna el principio de ciudadanía universal y el progresivo fin de extranjero; exige el respeto de los derechos humanos, en particular de las personas migrantes, manifestó Soliz.
Con esta oportunidad, la Asamblea Nacional, a través de la primera vicepresidenta Viviana Bonilla y la Acnur, representada por María Clara Martin, suscribieron un Acuerdo de Cooperación Interinstitucional, encanimado al desarrollo normativo en materia de derechos de las personas en condición de movilidad.
EG
