Henry Cucalón, asambleísta del Partido Social Cristiano, reclamó este martes la supuesta pretensión de querer aplicar una ley de impuestos que afecta la producción, empleo y la misma recaudación. El asambleísta se refirió también a la tasa aduanera, lo que para él es un impuesto que sería un duro golpe al consumo y comercio. Tampoco está de acuerdo con que se grabe un impuesto al décimo tercer sueldo, pues considera que es una clara regresión. “En lugar de apoyar a la inversión se le desincentiva”, recalcó.
Para Esteban Bernal es injusto que paguemos los resultados del manejo económico de un gobierno e hizo la cuenta regresiva del Impuesto Solidario que se creó luego del terremoto del 26 de abril de 2016. Considera que todavía no existen cuentas claras del destino de esos fondos. Habló de la intención de “bancarizar” y aseguró que eso tendrá un efecto negativo porque se desestabilizaría al sistema financiero al imponer un impuesto a la salida de capitales.
Un debate serio
Después de solicitar un debate serio, Augusto Espinosa solo vio dos salidas a la situación: negar la totalidad de la ley o aprobar unos cuantos artículos que podrían ser congruentes con una política pública para reactivar el sector económico. Para Espinosa, uno de los grandes vacíos del proyecto es la falta de visión de desarrollo cuando se habla de eliminar los incentivos a las empresas que invierten en ciencia, tecnología e innovación.
Las demás intervenciones giraron en torno a los mismos temas. Guillermo Celi propuso que se revea la tarifa eléctrica en el sector rural, mientras que Daniel Mendoza se mostró seguro de que la propuesta servirá para reactivar el sector económico, a la vez que insistió en que la banca debe ser creativa y sacar productos dirigidos a los diferentes sectores.
Silvia Salgado también se mostró de acuerdo con la propuesta de ley, porque fortalece la Economía Popular y Solidaria, protege la producción nacional, potencia el Estado de los gobiernos locales y garantiza la dolarización.
MC/pv
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