El Movimiento país tiene 54 asambleístas elegidos por la lista 35, pero en provincias, PAIS participó en alianza con otros movimientos, tal el caso de Tungurahua, en donde intervino con la Izquierda Democrática y el Partido Socialista; y, Azuay con el Movimiento de Equidad Democrática (MED), que desde el punto de vista legal constituyen fuerzas políticas diferente y, en consecuencia, tienen absoluta legitimidad de coincidir en una agenda.
La aspiración hubiese sido conformar esta bancada desde el primer día, pero había que deliberarlo al interior del movimiento afirmó.
Igualmente, Fernando Cordero indicó que el espíritu de la Constitución y de la Ley Orgánica de la Función Legislativa es que en el CAL estén personas de bancadas diferentes. El que PAIS y Sociedad Patriótica por tener la mayoría originaria quieran tener dos representantes en el organismo es contradictorio al espíritu de la ley, añadió.
En otro orden, al referirse a la organización de las comisiones especializadas, dijo que PAIS ha expresado su interés de presidir algunas de ellas, lo que no significa que desprecie a las otras. Para nuestra bancada la presidencia no necesariamente es una prioridad, sino la presencia de los asambleístas para facilitar el buen funcionamiento de las comisiones y viabilizar el estudio de los proyectos y propuestas.
Con respecto a la conformación de la Comisión de Fiscalización, manifestó que es una instancia de sustanciación del control político y fiscalización, de modo que quienes quieran en realidad fiscalizar no deberían estar conformando este organismo y mostrarle al país que son capaces de ser imparciales y permitir a los fiscalizadores hacer fiscalización.
Con la nueva normativa, ahora, las doce comisiones y los 124 asambleístas tienen atribuciones para fiscalizar, “de allí que no es sorprendente que PAIS sea el que inaugure la fiscalización”, concluyó.
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