Antes de iniciar el segundo debate del proyecto de Ley de Educación Intercultural, el Pleno recibió en comisión general a varios de los principales actores de la educación general, quienes expresaron sus puntos de vista en torno a esta iniciativa legal, sobre todo en cuanto tiene que ver con garantizar la rectoría del sistema en el ministerio sectorial; el reconocimiento de la gestión municipal como parte de la enseñanza pública; y, el fortalecimiento del sistema de educación intercultural bilingüe.
Una jornada cívica
La ministra de Educación, Gloria Vidal, invitó a los asambleístas a desarrollar una jornada cívica para cimentar un apoyo cohesionado a la educación, para que el país vea que somos capaces de ponernos de acuerdo para construir un Ecuador distinto. “Quién va a estar en desacuerdo con tener una educación pública gratuita y de calidad, con una carrera docente que dignifique al maestro; con entregarle a la sociedad parámetros y criterios para el mejoramiento de la educación; con lograr que los gestores de la educación no sean funcionarios de segunda”, preguntó, al expresar su convicción de que la Legislatura viabilizará la aprobación de esta ley.
“Esperamos que al finalizar el presente año tengamos una ley que garantice un educación para el siglo XXI”, dijo, tras anunciar a los docentes que tendrán un incremento del 150% de sus remuneraciones, por los meses de noviembre y diciembre, valores que serán cancelados 30 días después de promulgada la Ley de Educación Intercultural.
Patrimonio de los quiteños
Entre tanto, el alcalde de Quito, Augusto Barrera, pidió a la Asamblea determine de manera explícita el rol de la educación municipal, bajo el criterio de concurrencia, como parte del sistema público, tanto en la creación y mantenimiento de establecimientos; en su aporte a la universalización de la educación; y, en el mejoramiento de la calidad de la enseñanza, tras recordar que la educación municipal constituye un patrimonio sustantivo para los quiteños, tan importante como lo es el centro histórico.
Indicó que al momento el Municipio del Distrito Metropolitano de Quito mantiene 35 establecimientos, beneficiando aproximadamente a 20 000 niños, niñas, adolescentes y jóvenes, con una inversión anual de 25 millones de dólares, lo que le ha convertido en uno de los referentes de la educación en el país y en Latinoamérica.
Educación intercultural bilingüe
Mientras, Mariano Morocho, representante de la Secretaría de Educación Intercultural Bilingüe, subrayó que dado el carácter plurinacional del Estado ecuatoriano, reconocido en la Constitución, las leyes deben garantizar el efectivo goce de los derechos, tanto individuales cuanto colectivos. Por tanto, se debe fortalecer el sistema de educación intercultural bilingüe, como un derecho de los pueblos y nacionalidades.
Planteó que se incluya un capítulo específico dentro de la Ley de Educación que reconozca, garantice e institucionalice el sistema de educación intercultural bilingüe, que tiene como objetivo fundamental desarrollar la lengua y la cultura de los pueblos y nacionalidades.
70 años de lucha
En igual sentido, el presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador, Conaie, Marlon Santi, defendió la vigencia del sistema de educación intercultural bilingüe, como el espacio incluyente para la construcción de un verdadero Estado plurinacional e intercultural, mismo que se ha conseguido a base de una lucha que lleva más de 70 años.
Añadió que actualmente son 2 615 establecimientos que integran este sistema intercultural bilingüe, que permite ir hacia una verdadera educación que atienda las raíces culturales ancestrales de los pueblos y nacionalidades del Ecuador.
Tratamiento especial
De su lado, Luis Contento, representante de la Ecuarunari, enfatizó que la posición del movimiento indígena no es contraria a la Ley de Educación, sino que busca que en el proyecto se dé un tratamiento especial al sistema de educación intercultural bilingüe, fundamentados en los mandatos de la Constitución que garantizan este y otros derechos colectivos de las comunas, comunidades, pueblos y nacionalidades ancestrales.
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