El asambleísta Fernando Vélez, presidente de la Comisión De Desarrollo Económico, Productivo y la Microempresa, al ser consultado por los periodistas sobre la sentencia judicial en contra del Diario “El Universo” afirmó que todos los ecuatorianos debemos cerrar filas a favor de una auténtica libertad de expresión y rechazar el grave daño que causan las injurias, las calumnias, así como, la afectación que una opinión interesada o una publicación o difusión sin sustento producen en contra del buen nombre y prestigio de las personas a las que se ataca a través de la prensa, la radio, las redes sociales o la televisión causándoles un irreparable daño moral.
Es cierto que los medios de comunicación cumplen un rol muy importante cuando se sujetan a las reglas de la objetividad y la imparcialidad para ganarse la credibilidad de los espectadores, lectores y oyentes, agregó al sostener que está claro que Diario “El Universo” cometió un error cuando publicó el artículo del exeditor de opinión Emilio Palacio, en el que se acusó al Presidente de la República de haber ordenado un ataque armado con elementos de las Fuerzas Armadas en contra del hospital de la Policía.
Dijo que en el plano de la mayor objetividad hay que decirle al país que el exeditorialista Palacios no tenía, ni tiene las pruebas de lo que afirmó; por lo tanto, se trató de una opinión aventurada que se autoexilió en los Estados Unidos y no ha tenido ni la valentía, ni el coraje de los dueños del Diario “El Universo” de quedarse en el país para dar la cara luego de haber lanzado semejantes calumnias en contra del Jefe de Estado. Si él sostiene que dijo la verdad ¿porqué no ha probado lo que dice?, se preguntó
Vélez aseguró que es evidente el error de este medio de comunicación, por lo que “sus propios ejecutivos se han mostrado abiertos a hacer la necesaria rectificación”. Si no hubo error, muchos nos preguntamos: ¿entonces qué se va a rectificar?
Declaró que sería un grave error que los medios de comunicación se alineen en contra de un gobierno o un Presidente de la República por un mal entendido “espíritu de cuerpo”, cuando la opinión pública ecuatoriana exige responsabilidad de parte de los medios de comunicación para que no se ataque y se desbarate públicamente la imagen y el buen nombre de una persona, cuando dan una opinión interesada o publican noticias sin la debida comprobación. Se suele decir –agregó- que lanzada la piedra el daño está hecho y cuando esto ocurre ya se ha destruido la trayectoria y la vida misma de un ciudadano, añadió.
El parlamentario señaló que la Constitución en su artículo 66, numeral 7, establece el derecho de toda persona agraviada por informaciones sin pruebas o inexactas, emitidas por medios de comunicación social a la correspondiente rectificación, réplica o respuesta en forma inmediata, obligatoria y gratuita en el mismo espacio y hora, pero lamentablemente, esta norma constitucional es letra muerta y no se cumple, por tanto, se viola la misma Carta Fundamental del Estado a pretexto de la libertad de expresión.
