Los suelos se encuentran erosionados, hace falta capacitación para el manejo de cultivos nativos, financiamiento para la actividad productiva. El uso de químicos ha provocado el deterioro de los terrenos y de la salud de los campesinos, hace falta técnicas adecuadas para el control de plagas y enfermedades, señalaron los representantes de organizaciones como la Fenocin, FEI, Coordinadora Nacional Campesina Amaru, organizaciones montuvias, AEJUR ante la Comisión de Soberanía Alimentaria.
Es necesario dar prioridad al uso de semillas nativas, establecer lugares para su venta y se requiere investigación del INIAP para mejorar la productividad, manifestaron.
Plantearon la implementación de un registro para cierto tipo de semillas que permita reconocer la riqueza genética, pero que no se constituya en una herramienta para impedir su comercialización.
Subrayaron que hace falta el asesoramiento especializado para encontrar alternativas locales y adecuadas para el manejo de cultivos; también, respetar los conocimientos y saberes de los pueblos y nacionalidades indígenas sobre su forma de producción y semillas y que e respete la producción de la semilla nativa-local.
Hay que incentivar el intercambio de conocimientos de semillas nativas; que el Estado impulse el modelo de producción agroecológica y de producción limpia (bioinsumos) como un mecanismo para garantizar la soberanía alimentaria; además, de impulsar buenas prácticas de manejo en agroecología para concienciar en el manejo de residuos y envases para evitar la contaminación, añadieron.
Por último, propusieron que el Estado y los gobiernos autónomos descentralizados fomenten espacios de comercialización para los pequeños productores y la necesidad de mejorar los procesos de poscosecha para mejorar la comercialización.
Asambleísta por la Provincia de Esmeraldas
