Iniciaré mi intervención señalando que el VOLUNTARIADO es el resultado de una libre elección, es una opción ética, personal, gratuita, que NO ESPERA RETRIBUCIÓN O RECOMPENSA, por eso en este día, mi saludo especial a cada ciudadana voluntaria y ciudadano voluntario de este país.
Como antecedente legal, en la normativa vigente sobre el voluntariado, tenemos los artículos 37 y 38 de la Ley Orgánica de Participación Ciudadana mediante los cuales el Estado reconoce al voluntariado de acción social como una forma de participación social, como una actividad de servicio social y participación libre de la ciudadanía y las organizaciones sociales en diversos temas de interés público, con independencia y autonomía del Estado, así como también se establece la protección al voluntariado, destacando que en los acuerdos que se realicen entre las organizaciones sociales y las instancias del Estado se fijarán las condiciones de la labor solidaria, sin relación de dependencia, cuidando que con estas labores no se precarice el trabajo.
Es así, queridos ecuatorianos, que este proyecto de ley, que hoy estamos debatiendo crea las condiciones, marcos institucionales y políticos a través de los cuales los voluntarios y voluntarias PUEDAN DESARROLLAR SU LABOR DE FORMA SEGURA, ORGANIZADA Y PROFESIONAL.
Como hito importante, se genera un REGISTRO para voluntarios que dentro de los beneficios que traerá este, será la ATENCIÓN PREFERENCIAL en caso de necesitar el servicio de Salud Pública por alguna calamidad propia del ejercicio del voluntariado, a más de que el Estado podrá tener datos estadísticos actualizados para que se pueda generar POLÍTICAS PÚBLICAS EN FAVOR de los ciudadanos voluntarios, que no buscan más que AYUDAR y PROMOCIONAR una cultura de paz, de solidaridad y la asistencia humanitaria, mediante los enfoques de interculturalidad, interseccionalidad, transversalidad y progresividad.
Es importante destacar el reconocimiento de la actividad del voluntariado dentro de las POLÍTICAS AFIRMATIVAS DE INCLUSIÓN para los cargos de nominación o designación en las instituciones públicas, como una retribución más que merecida para las ciudadanas y los ciudadanos voluntarios.
Por último, quiero enfatizar el desarrollo dentro de la ley de la figura de PREVOLUNTARIADO como un espacio para los menores de 16 años, donde serán capacitados para esta actividad, que deben contar con el previo consentimiento de sus padres, precautelando el principio del interés superior de los menores y cuidando siempre que esto no se convierta en una herramienta para el trabajo y la explotación infantil.
Este proyecto es oportuno, hoy en día que la violencia se apodera de nuestras calles, esperemos que el gobierno acoja esta herramienta legal y cree las oportunidades que los jóvenes necesitan, para que nuestros adolescentes a más de acceder a la educación, a la salud, a la cultura, al deporte, se conviertan en aquellos ciudadanos que promuevan el ALTRUISMO y la SOLIDARIDAD, como un paso a un ESTADO DE BIENESTAR.
Franklin Omar Samaniego Maigua nació el 2 de septiembre de 1971 en la ciudad de Riobamba, Ecuador. Desde una edad temprana, demostró un gran interés por el estudio y el aprendizaje, asistiendo a la Pensionado "Olivo" durante su educación primaria y luego al Colegio "San Felipe Neri" para sus estudios secundarios, ambos en su ciudad natal.
Posteriormente, continuó su formación académica en la Universidad Central del Ecuador, donde se graduó como Licenciado en Ciencias Públicas y Sociales, marcando así el inicio de una destacada carrera en el ámbito legal. Complementó su formación con estudios en la Universidad Católica de Cuenca, donde obtuvo su título de Abogado de los Tribunales de la República y más tarde su Doctorado en Jurisprudencia.
La búsqueda constante de conocimiento llevó a a obtener una especialización en Contratación Pública y Administración del Estado en la Universidad Central del Ecuador, así como una Maestría en Derecho Constitucional en la Universidad Tecnológica Empresarial de Guayaquil (UTEG), consolidando su experiencia en diversos campos del derecho.
A lo largo de su trayectoria profesional, ha participado en numerosos cursos y seminarios especializados, abarcando áreas como administración de justicia, derecho civil, y legislación relacionada con la gestión pública, entre otros.
Su experiencia laboral incluye roles como Asesor Jurídico en empresas turísticas, Director de Asesoría Jurídica y Gerente en la Empresa Turística Ciudad Mitad del Mundo, así como diversas funciones en el ámbito legislativo, donde ha desempeñado roles destacados como Asambleísta por la Provincia de Pichincha y Vicepresidente de Comisiones Especializadas en la Asamblea Nacional del Ecuador.
Ha sido un activo defensor de los derechos humanos, los derechos de las mujeres y los derechos de los trabajadores, participando en varios grupos parlamentarios y demostrando un compromiso constante con el servicio público y el bienestar de la sociedad. Su dedicación y pasión por el servicio público lo han convertido en un referente en el ámbito legal y político en Ecuador.
