18 AÑOS EDAD MÍNIMA PARA CONTRAER MATRIMONIO
Durante la sesión N. 291 del pleno Legislativo, la Asambleísta Betty Carrillo, Presidenta de la Comisión de los Trabajadores, señaló que las reformas que se han emprendido desde la Asamblea Nacional, han tenido por objeto revertir las inequidades de nuestro sistema jurídico, y en este caso ir desvaneciendo poco a poco las manifestaciones machistas presentes en la legislación civil.
La legisladora mencionó que el matrimonio en términos ideales debería constituir el encuentro de dos libertades y garantizar para ambos contrayentes una vida en común para que puedan ayudarse recíprocamente en todas las instancias de su existencia; el Estado y por ende el sistema jurídico están en la obligación de intervenir en caso de que no existan todas estas garantías para la igualdad de derechos, obligaciones y capacidad legal de los cónyuges, y tomar las medidas necesarias para remediar la situación de injusticia o de discriminación que pueda atravesar cualquiera de los miembros de la pareja.
Las reformas que hoy se discuten cumplen con este objetivo, son pertinentes y necesarias, en cuanto actualizan la terminología de nuestro código civil, corrigen y eliminan las expresiones que directa o indirectamente tienen un carácter discriminatorio o machista y además se orientan la protección de los derechos de niños, niñas y adolescentes.
Carrillo señaló, que se debe brindar un derecho a la protección de la familia en sus diversas manifestaciones, así como también garantizar los derechos de los individuos que conforman uniones civiles o crean vínculos familiares legalmente reconocidos.
En este contexto, se vuelve necesario recalcar que la defensa de la familia, no es la defensa de una visión subjetiva de la moralidad, para nosotros es la construcción de un vínculo legal que les posibilite a las personas el desarrollo de sus derechos en condiciones de equidad y sin ser objeto de discriminación, defender a la familia, es estar conscientes de la diversidad de formas que este vínculo social se manifiesta, es abrir los ojos a nuestra propia realidad y legislar para ella.
La Asambleísta Carrillo dijo que “y si nuestra realidad social demuestra la diversidad existente en las uniones familiares y civiles, cada persona tiene el derecho de creer y acoger para sí, el modelo de familia que considere pertinente a sus convicciones y necesidades, pero esta elección debe hacerse con plena libertad y la legislación nacional debe garantizar el ejercicio de la misma”.
La presidenta de la CEPDTSS, presentó observaciones para este proyecto, desde el primer debate y la Comisión acogió el pedido de incluir como causal de nulidad del vínculo matrimonial (artículo 4 que sustituye el CC art.96), el “matrimonio servil”, en tanto constituye una vulneración a los derechos de libertad de las personas, en especial de las mujeres y las niñas.
Cabe señalar que según la oficina de las Naciones Unidas contra la droga y el delito, en su ley modelo referente a la trata de personas, el matrimonio servil o forzado se define como toda institución o práctica en virtud de la cual “Una mujer (persona) o menor, sin que la asista el derecho a oponerse, es prometida o dada en matrimonio a cambio de una contrapartida en dinero o en especie entregada a sus padres, a su tutor, a su familia o a cualquier otra persona o grupo de personas”.
La reforma busca tomar las medidas necesarias para remediar las condiciones de injusticia y discriminación que puedan atravesar cualquiera de los miembros de la pareja. Las reformas que hoy se discuten cumplen ese objetivo, son pertinentes y necesarias por cuanto actualizan la terminología de nuestro Código Civil, corrigen y eliminan las expresiones que directa o indirectamente tienen un carácter discriminatorio o machista y además se orientan a la protección de los derechos de los niños, niñas y adolescentes. NMS
Betty Carrillo, Mujer de izquierda, enamorada de la libertad y la justicia social. Decidida a ser participe del cambio positivo en la historia del Ecuador, Actual Asambleísta por la Provincia de Tungurahua, na..
