En el marco de la primera jornada de socialización del proyecto de Ley de Movilidad Humana, que se realizó en Cuenca, la primera vicepresidenta de la Asamblea Nacional, Rosana Alvarado, subrayó que es una “Ley esperanza para muchas personas, una luz que enciende el Ecuador en América Latina”.
Afirmó que la aprobación de esta normativa constituye un desafío muy grande, serán varios los capítulos que se incorporen y sin lugar a dudas, llamará la atención en América Latina y esperanza gigante para los migrantes.
Subrayó que a la migración la están analizando como oportunidad para que las personas puedan salir y entrar del país cuando lo deseen: por estudios, por mejores oportunidades, por relaciones sentimentales, por experimentar y conocer, que son lógicas que deben estar incorporadas en la ley, que garantiza el buen trato al refugiado y al migrante.
“Hay que tener conciencia que la razón de ser de la migración, va mucho más allá de la política de un solo país, que la propuesta de una Ley de Movilidad es una luz que se enciende, que nos ilumina, que nos ayuda y que da esperanza a un pueblo que sabe lo que ha significado la migración y que está dispuesto a seguir en la lucha”, puntualizó.
Igualmente, expresó que en muchas ocasiones la solución a estos problemas no solo está en la Ley de Movilidad Humana, sino que guarda relación con otras normas jurídicas, como es el caso de las sanciones y prevenciones en el cometimiento de diversos tipos de delitos, que se establecen en el Código Integral Penal.
Rosana Alvarado aclaró que esta ley no solo se refiere a la migración, sino a la movilidad humana en general, con enfoque integral.
Por último, felicitó a la Comisión de Relaciones Internacionales por seleccionar a la provincia del Azuay, tierra de migrantes, como anfitriona para iniciar el proceso de socialización del proyecto de Ley de Movilidad Humana.
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