El asambleísta Alex Guamán Castro, por la circunscripción de Estados Unidos y Canadá, informó que alrededor de 300 ecuatorianos, oriundos de Esmeraldas, inmersos en la actividad de la pesca artesanal se encuentran detenidos en Centro y Norteamérica por delitos de narcotráfico, luego que cayeran en las garras de ciertas mafias.
Comentó que, junto a su alterna Karyna Sánchez, realiza un programa intenso de visitas a las prisiones tanto federales como de inmigración, donde, lamentablemente, se han encontrado con la alarmante noticia de que hermanos ecuatorianos, especialmente de la provincia verde, están siendo detenidos en los mencionados sectores y hoy están siendo sancionados con penas de hasta 10 años de prisión.
Los pescadores artesanales se han convertido en presa fácil de la delincuencia, de las mafias. La ley es muy fuerte en Norteamérica, pues aplican de 10 a 15 años de privación de la libertad; a los detenidos en Alta Mar por parte de las embarcaciones estadounidenses les llevan al Estado de la Florida, precisó.
Encuentro ciudadano
Bajo estos antecedentes, anunció que este sábado, 29 de enero, a partir de 14:00, se ha organizado un encuentro en Esmeraldas sobre Emigración y Seguridad de la Vida en el Mar y Fronteras con el gremio de trabajadores de la pesca artesanal, las autoridades de la zona y la ciudadanía, para definir mecanismos de concientización sobre la problemática.
Manifestó que al diálogo se invitó a la mayor parte de los ministros, a fin de que, de manera conjunta, se puedan establecer respuestas, alternativas y oportunidades concretas frente a esta grave situación, para que los hermanos pescadores artesanales eviten caer en el negocio de las mafias del narcotráfico.
Es factible poner en marcha la misma política aplicada a favor de los migrantes retornados, a quienes se les ha presentado buenas oportunidades para que desarrollen microempresas y emprendimientos, que incluso les permita a los pescadores ayudar a las familias de los que están cumpliendo penas de prisión en Estados Unidos, dijo.
Recordó que con la Cancillería se han dado pasos importantes de socialización respecto de los riesgos de viajar ilegalmente e incluso sin retorno. El sueño americano hoy es una pesadilla, que implica desempleo, maltrato, discriminación, más aún cuando no se habla el idioma inglés, alertó.
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