2 mil 600 millones de ahorro para el país de 2010 a 2015, la generación de 220 mil empleos directos y 35 mil indirectos, más de 500 millones de dólares inyectados a la economía popular y solidaria, fueron las cifras que citó Santiago Vásquez, director general del Servicio de Contratación Pública (Sercop), en su intervención en la Comisión de Desarrollo Económico, en donde se habló de la optimización de recursos a través del sistema de compras públicas, además de la subasta inversa realizada este año para la compra de medicamentos.
Según explicó Vásquez, la compra pública se convirtió en un motor de transformación, especialmente en la economía popular y solidaria, pues según dijo se disminuyeron las barreras de entrada de la compra pública. “Hoy los uniformes que usan los estudiantes, los pupitres, el transporte vienen de ecuatorianos que cumplen las características para ser proveedores del sector público”, aseguró. En este sentido, se refirió a la catalogación inclusiva, que es un mecanismo que elimina trabas para ser parte de los proveedores de las instituciones del Estado.
Subasta para la compra de medicinas
Una de las interrogantes de los asambleístas de la comisión fue cómo se hizo el proceso de subasta inversa para la compra de medicinas, para las 3 mil entidades de salud que forman parte del sistema público. Santiago Vásquez, explicó que la información sobre la supuesta falta de registro sanitario en los medicamentos y la mala calidad, obedece a una estrategia de mercado de las farmacéuticas. “En Ecuador se vendían medicinas 600% más caros que en países vecinos. Lo que hicimos como gobierno fue implementar una subasta pública y ya adjudicamos 319 medicamentos con un ahorro de 300 millones de dólares para los siguientes dos años”, recalcó.
Todo el proceso está en las páginas web creadas para que cualquier persona pueda verificar. Por ejemplo, en www.compraspublicas.gob.ec en primera página están los medicamentos adjudicados, con cada registro sanitario. “Hoy cuando hablamos de compras públicas hablamos de mecanismos de ahorro, información, transparencia, lo que marca un antes y un después en la contratación pública en el país. Los medicamentos no son un negocio, son un derecho”, enfatizó Soledad Buendía, presidenta de la comisión.
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