La presidenta de la Asamblea, Gabriela Rivadeneira, tras recordar que el proyecto de Ley de Comunicación estuvo en análisis y debate por cuatro años, comentó que las críticas de cierta prensa, que utilizó su poder para denigrar la integridad de los seres humanos, de los y las ecuatorianas, contrastan con el apoyo firme de la ciudadanía a la normativa.
En el actual proceso histórico se ha reivindicado la soberanía y dignidad de los ecuatorianos, por tanto las amenazas y mecanismos de presión no tienen cabida, dijo, al destacar que la Ley de Comunicación, que golpea los intereses de los grandes medios porque democratiza la palabra y las voces, es una de las herramientas básicas para el cambio sustancial de la historia del Ecuador.
Mencionó que se sabía de las actitudes que adoptarían determinados medios, en torno a plantear demandas, más aún cuando éstos fueron los responsables de polemizarla antes y durante su construcción, y ahora luego de su aprobación.
En todo caso, manifestó que el pueblo apoya y es el soporte de la vigencia plena de la ley, ya que hace realidad una nueva información para reivindicar las identidades culturales, la producción nacional, a nuestros artistas, quienes llevan al Ecuador y al mundo nuestras manifestaciones artísticas, como muestra de la diversidad de la nación.
Argumentó que los medios comunitarios fueron invisibilizados, así como aquellos medios de comunicación que están en la ruralidad, en nuestros barrios, en los territorios pequeños, que jamás han tenido la oportunidad de ponerse al mismo nivel de un medio de comunicación de la capital o de las grandes ciudades. Esa es una verdadera democratización, eso es avanzar al plan nacional del buen vivir, subrayó.
Dimos, continuó, un paso sustancial para las futuras generaciones, a fin de poder, realmente, controlar los programas que están viendo nuestros hijos; que a través de la televisión no sean reproductores de facetas machistas, etnocentristas, discriminadoras que hemos tenido en los últimos años, sino que los medios, bajo una nueva visión, contribuyan a la educación integral de la población.
Aquí, estaremos para defender el mandato de la Constitución, el pronunciamiento de la gente en la consulta popular y la actuación de la Asamblea, precisó Gabriela Rivadeneira, al reconocer la facultad del Ejecutivo, en calidad de colegislador, para formular observaciones.
MG/pv
