La titular del Legislativo, Gabriela Rivadeneira, confirmó que la Asamblea Nacional, por medio de la Comisión de Soberanía Alimentaria, redoblará esfuerzos para tramitar la Ley de Tierras hasta mediados del mes de noviembre, en un proceso de construcción colectiva, con aportes de los sectores indígenas y campesinos del Ecuador.
Al dirigirse a representantes de la Confederación de Pueblos y Organizaciones Indígenas y Campesinas del Ecuador (FEI), quienes coparon el auditorio José Mejía Lequerica del Parlamento, Gabriela Rivadeneira explicó que la Asamblea Nacional es un espacio democrático que está abierto a recibir los planteamientos de quienes han sido tradicionalmente excluidos en la elaboración de leyes.
“Aquí es donde tenemos que debatir: tierras, territorio y un tema que tenemos pendiente que es el tema de comunas y como vamos construyendo una visión integral del acceso a derechos y recuperación de nuestras tierras para la producción”, explicó.
La principal del Parlamento sugirió que además de la propiedad de la tierra enfocada a fines productivos, la Ley de Tierras debe contemplar aspectos como el abastecimiento de una producción alimenticia saludable para todos los ecuatorianos, así como incentivar la exportación de productos ecuatorianos procesados, dentro de la visión del cambio de matriz productiva.
El presidente de la Comisión de Soberanía Alimentaria, Miguel Carvajal, por su parte, reiteró que en la normativa será esencial el aporte de la FEI, ya que no se la realizará “desde las Cámaras de Agricultura o el Banco Mundial”, sino incorporando las experiencias de los indígenas y campesinos en todas las regiones del Ecuador.
Carvajal remarcó que, una vez culmine el proceso de socialización con los sectores del agro ecuatoriano, el proyecto de Ley podrá ser presentado, para discusión del pleno de la Asamblea, hasta mediados de noviembre.
Entre los puntos principales de la propuesta de Ley se contempla la creación de un fondo para la tierra, con el fin de canalizar recursos a la productividad, y la redistribución adecuada de la tierra, para evitar que predios agrícolas con vocación productiva queden abandonados.
Estos puntos coinciden con las peticiones de la FEI, a decir de su presidente, José Agualsaca, quien llevó la voz del sector indígena y campesino ante la Asamblea. “Creemos que debemos fomentar la producción y productividad de pequeños y medianos agricultores, para dar de comer a la población ecuatoriana e incorporarlos a una matriz productiva agraria”, precisó.
Agualsaca confirmó que representantes de la FEI asistirán a la Comisión de Soberanía Alimentaria para formular propuestas y hacer un seguimiento al proyecto de Ley de Tierras. En un breve discurso introductorio, Agualsaca recordó que la FEI tiene un amplio respaldo en el sector campesino e indígena, gracias a una lucha de 70 años por la reivindicación de derechos indígenas y campesinos, con el aporte de líderes de la talla de Dolores Cacuango y Tránsito Amaguaña.
