El Director Ejecutivo de la Asociación Ecuatoriana de Editores de Periódicos (Aedep), Alfredo Negrete, enfatizó que la Constitución de Montecristi y que está vigente en el Ecuador es la más avanzada en materia de libertad de expresión, pues los artículos 384, 417 y 424, según los cuales en todo momento prevalecerán los derechos humanos.Recordó que la Disposición Transitoria constitucional primera, establece que la Asamblea Nacional debe expedir una Ley de Comunicación coherente con la libertad de expresión y la regulación obligatoria del espectro radioeléctrico.
Aseveró que “hoy por hoy nos vemos obligados a debatir temas sobre la autorregulación, libertad de expresión, ética periodística”, porque los medios no se adelantaron a los avances de la comunicación e información.
Indicó que el gran valor de la autorregulación está dado por el compromiso voluntario moral no solo de los propietarios, directivos, consejo editorial, periodistas, sino de entre ellos y el público para garantizar una información veraz, oportuna, objetiva y contrastada.
No existen sanciones
Entre tanto, Llúcia Oliva, presidenta del Consejo de la Prensa de Cataluña-España, al señalar que la información debe ser veraz, contrastada y con un compromiso periodístico honesto, manifestó que en su país existe el Consejo de la Información, mismo que recoge las quejas de los ciudadanos cuando se produce una distorsión deliberada en su difusión y el tratamiento inadecuado de las opiniones vertidas que han sido perjudiciales para los derechos e intereses legítimos de las personas u organismo afectados, sin embargo, al ser autorregulaciones que se imponen los medios, las rectificaciones, en algunos casos, no son cumplidas y pese a ello no pueden ser sancionadas.
Manifestó que hace 18 años se impusieron el Código Deontológico que norma la gestión de los medios, en el que se recoge la declaración de principios de la profesión periodística que contiene cinco ámbitos; la calidad y solvencia periodística; utilización de medios lícitos para conseguir información, misma que debe ser fundamentada; reglas para evitar la corrupción periodística, es decir no se puede hacer publicidad e informar a la vez, manipular imágenes, información veraz y bien hecha; tratar con especial esmero toda información que afecte a menores, evitando difundir su identificación, a fin de proteger a la infancia; actuar con especial responsabilidad y rigor en caso de informaciones u opiniones con contenidos que puedan suscitar discriminaciones por razones de sexo, raza, creencia o extracción social o cultural , así como incitar al uso de la violencia.
La autorregulación periodística está ligada a la credibilidad y la ética que es la base del periodismo, para alcanzar un compromiso honesto y profesional de quien cumple esta función proporcionando una información veraz y contrastada.
Frecuencias radioeléctricas
De su lado, Cynthia Cárdenas, de México, precisó que el periodismo es una forma de expresar el derecho a la información de la ciudadanía, por lo que no se puede condicionar la libertad de expresión. Igualmente consideró que mediante ley se debe regular el otorgamiento de las frecuencias del espectro radioeléctrico a fin de evitar caos, el monopolio, el oligopolio y establecer las sanciones para castigar a las personas.
Con respecto a la información, dijo que debe existir diversidad de fuentes, pero con igualdad de oportunidades, a fin de garantizar que la misma llegue a todos los sectores sociales: públicos, comerciales, comunitarios, locales, etc. La ética y la solidaridad deben estar acompañadas, dijo al sostener que debe estar basada en principios de derechos humanos.
Reglamentar el ejercicio periodístico
Kela León, Directora del Consejo de la Prensa del Perú, manifestó que su país eligió a siete ciudadanos reconocidos por su trayectoria y servicio a la comunidad para que se encarguen de evaluar las quejas de los lectores cuando se sintieran afectados por una información publicada y exigieren rectificaciones.
Indicó que los medios de comunicación no cumplían con la ley de rectificación, por ello según encuestas de opinión la prensa tenía una valoración muy baja, tomando en cuenta que los medios de comunicación tenían una agenda propia.
En los últimos 10 años crecieron las quejas y el mecanismo de autorregulación no era suficiente y se observó que el proceso no juzga ni evalúa artículos de opinión. Lo que sí hacemos es una vinculación directa entre la falta de la ética con el aumento de ataques contra periodistas, porque la ciudadanía es la que protesta por la mala información que proporcionan, subrayó.
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