La resolución de la Asamblea por la cual considera que la renuncia del Fiscal, Washington Pesántez, sería un elemento que contribuiría a la transparencia de la justicia, tiene un carácter ético y moral, mas no vinculante; sin embargo, la actitud del funcionario de no acatarla demostraría su ansia indeterminada por mantenerse en el poder, subrayó la asambleísta Rossana Alvarado.No obstante, recalcó que el incumplimiento de las funciones que le asigna la ley al Fiscal es causal de juicio político y, en vista de que la Asamblea ha sido frontal y contundente al exigirle la destitución de los fiscales provinciales, en caso que no lo haga, sumaría un motivo más para pensar en un juicio político.
Recordó que lo que se juzga no es su actuación frente a un accidente de tránsito, sino su responsabilidad institucional respecto del rol de los fiscales distritales y otros servidores del organismo que, mediante un comunicado público, anticiparon criterios, en respaldo al doctor Pesántez, en aplicación de un malhadado espíritu de cuerpo, por lo que la Asamblea estimó que lo más saludable sería que deje el cargo, para que garantice la independencia en el proceso de investigación del accidente de tránsito en que falleció la señorita Natalia Emme.
Indicó que el pronunciamiento del Fiscal de mantenerse en su puesto ya lo había anticipado cuando dijo que los pronunciamientos en torno a una posible renuncia eran sueños de perro.
“Vamos a ver quién es quién; quién le debe algo al Fiscal, quién se deja extorsionar por las prácticas mafiosas que fueron denunciadas en el Pleno de la Asamblea, quién no le debe nada y quién no tiene miedo cuando se trata de aplicar la Ley”, sentenció.
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