El presidente del Parlamento Indígena de las Américas, José Poyo, mantuvo una reunión de trabajo con asambleístas de diversas bancadas legislativas y los miembros de la Comisión de Derechos Colectivos, con quienes compartió sus experiencias en materia legislativa relacionados con los derechos colectivos.
El objetivo de estos encuentros es apoyarse mutuamente entre todos los países de América Latina para impulsar agendas colectivas tendentes a reconocer y proteger la existencia de los pueblos y comunidades indígenas, garantizándoles los derechos consagrados en la Constitución, los tratados, pactos y convenios internacionales y otras normas de aceptación universal, así como su participación activa en la vida de la nación, la preservación de sus culturas, el ejercicio de la libre determinación de sus asuntos internos y las condiciones que los hacen posibles.
En este marco, José Poyo entregó una colección de leyes dictadas en Venezuela que recogen los principios de defensa de los derechos de los pueblos ancestrales, relacionados con idiomas indígenas, ley del artesano, de patrimonio cultural de los pueblos y comunidades, de los derechos de los niños, niñas y adolescentes en la legislación nacional e internacional, la declaración de las Naciones Unidas sobre derechos de los pueblos indígenas, así como las resoluciones de la sesión ordinaria realizada en Guatemala, fotografías, documentos, entre otros. Los asambleístas deben contribuir para elaborar las leyes que garanticen los derechos de todos los pueblos y comunidades, dijo.
Indicó que en los últimos años los pueblos indígenas del mundo han alcanzado grandes logros, como resultado de los esfuerzos iniciales de hombres y mujeres que alzaron su voz para hacer presencia en varios espacios donde fueron invisibilizados y uno de ellos es sin lugar a dudas la aprobación de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas el 13 de septiembre de 2007, luego de 20 años de discusión entre la dirigencia indígena y los Estados.
Destacó que la declaración establece nuevas obligaciones para los Estados como el garantizar el derecho a considerarse diferentes y ser respetados como tales, valorando la unidad en la diversidad como expresión del reconocimiento de que el planeta tierra está habitado por hombres y mujeres con cultura, idiomas, rostros y colores diferentes, a más que se establece un marco jurídico para una existencia digna tanto individual como colectivamente.
El titular del organismo legislativo, Marco Murillo, anunció que con el grupo parlamentario de indígenas solicitarán al Consejo de Administración Legislativa (CAL) y al presidente de la Asamblea la autorización respectiva para desarrollar una asamblea extraordinaria en agosto de este año, que contará con la participación de los dirigentes de las organizaciones indígenas tanto del Ecuador como de otros países amigos quienes expondrán sus criterios y aportarán con elementos de su realidad en materia de derechos colectivos.
Es necesario coordinar y llevar una sola voz y un planteamiento unificado en los temas de interés de los pueblos indígenas en las reuniones que se desarrollan en el Alba, la Unasur y al Parlamento Latinoamericano, concluyó.
JLVN/pv
