La democracia se construye con más democracia. No es el momento de desestabilizar el país. Es momento del diálogo y de escuchar al pueblo pero sobre todo de cumplir con su palabra y los ofrecimientos de campaña. No es la solución en los actuales momentos la Muerte Cruzada y cálculos políticos, debemos ser responsables y analizar la situación económica del país. La lucha de los sectores sociales en las calles es legítima pero también es legítimo que el gobierno responda con seriedad a los pedidos del pueblo movilizado.