La Asamblea Nacional nunca intervino en la selección del Superintendente de Bancos, lo único que hizo es un acto protocolario de posesionarlo.
La Asamblea no es la causa del problema, el gobierno y el Consejo de participación Ciudadana son los principales responsable de este enredo jurídico que enfrenta nuevamente el país.
Es lamentable que los ciudadanos tengamos que esperar que el gobierno solucione el problema del Superintendente de Bancos, cuando existe otros temas más importantes como la falta de empleo, la inseguridad, la violencia en las calles y que hasta el momento no existe una respuesta efectiva desde el Ejecutivo.