Con el objetivo de equilibrar la relación entre el Estado y sus proveedores, así como de garantizar la liquidez de estos últimos, los legisladores Liliana Durán y José Vallejo presentaron el proyecto de Ley Orgánica Reformatoria a la Ley Orgánica del Sistema Nacional de Contratación Pública, conformado por nueve artículo
Los ejes de la propuesta guardan relación con los principios de la contratación pública, el establecimiento de un índice de fiabilidad de pagos de las entidades contratantes, mecanismos para asegurar la liquidez de los contratistas, participación de los proveedores del Estado en el directorio del Servicio Nacional de Contratación Pública (SERCOP), estudios previos a la contratación, declaratoria de procedimientos desiertos, certificaciones de administradores de contratos y supervisores, cómputo de plazos contractuales, así como modificaciones en los términos para la apelación.
En este contexto, la legisladora Liliana Durán indicó que el objetivo fundamental de la reforma es garantizar condiciones claras entre contratistas y contratantes, con la participación de todos los actores, incluidos los de la economía popular y solidaria, y otros sectores que demandan mayor claridad en la normativa.
Por su parte, el asambleísta José Vallejo manifestó que, principalmente, la reforma busca establecer reglas claras para contratistas y entidades contratantes, incluyendo aspectos como la vigencia tecnológica, la representación de los proveedores en el directorio del SERCOP, facilidades para el otorgamiento de anticipos e índice de cumplimiento del sector público, entre otros temas.
Según el proyecto, el paquete de reformas incorpora las sugerencias presentadas por la Asociación de Proveedores del Estado; las observaciones formuladas por su representante, Diana Jaramillo, durante la sesión 1014 del Pleno de la Asamblea Nacional; los aportes del Gobierno Autónomo Descentralizado Provincial del Azuay; y los criterios de expertos y expertas en la materia.
Liliana Elizabeth Durán Aguilar nació en Abañín, una parroquia de la histórica ciudad de Zaruma, en la provincia de El Oro. Se define como una lideresa feminista y una luchadora incansable por los derechos de las mujeres y los trabajadores. A lo largo de su vida ha sido promotora socio-organizativa y ha mantenido un firme compromiso con la Revolución Ciudadana, desde donde ha articulado acciones en favor de una sociedad más justa y equitativa.
Su trayectoria se ha centrado en el impulso de leyes y proyectos que promuevan la autonomía económica de las mujeres, su empoderamiento real y el ejercicio pleno de sus derechos, especialmente en lo relacionado con la toma de decisiones sobre sus cuerpos y vidas. Además, ha dedicado su vida a defender los derechos laborales, revalorizando al capital humano como motor del desarrollo.
Es licenciada en Gestión del Desarrollo Local Sostenible por la Universidad Politécnica Salesiana. Se ha formado como defensora de los derechos humanos de las mujeres con ONU Mujeres (UNIFEM), y se ha capacitado en normas internacionales del trabajo y derechos laborales en espacios de alto nivel como la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en Turín (Italia), Madrid (España) y Antigua (Guatemala). Asimismo, cursó formación en Realidad Nacional y Género en el marco de programas impulsados por el BID, la OIT, la CIOLS/ORIT y la Universidad de Chile.
En el ámbito político, fue Asambleísta Nacional del Ecuador durante el período 2017-2021, tiempo en el cual presidió la Comisión Especializada Permanente de los Derechos de los Trabajadores y la Seguridad Social, así como el Grupo Parlamentario por los Derechos de los Trabajadores y el Grupo Interparlamentario de Amistad con Cuba. También se desempeñó como primera vicepresidenta de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) entre 2014 y 2021, y lideró importantes espacios de participación ciudadana y feminista como el Foro Permanente de las Mujeres Ecuatorianas y la Asamblea Ciudadana Plurinacional e Intercultural para el Buen Vivir.
Entre sus reconocimientos destacan la mención de honor del Premio “Manuela Espejo”, otorgado por el Municipio de Quito en 2012, y el reconocimiento al Liderazgo Comunitario por parte de organizaciones sociales en diciembre de 2024. Ha sido autora y coautora de diversas publicaciones sobre derechos de las mujeres, participación política y liderazgo social, además de haber contribuido con artículos en encuentros internacionales y en informes alternativos ante organismos como la CEDAW.
Liliana Durán también ha ejercido cargos honoríficos de relevancia, como vocal del Directorio del Consejo Nacional de las Mujeres (hoy Consejo Nacional para la Igualdad de las Mujeres y Género), vicepresidenta alterna de la CIOSL y representante del sector laboral en el directorio del SECAP, siendo la primera mujer en ocupar dicha representación.
Su voz firme y comprometida sigue siendo un referente en la defensa de los derechos humanos, la igualdad de género y la justicia social en el Ecuador.