Recibimos la visita de los estudiantes de la Unidad Educativa “Nanegalito” en la Asamblea Nacional, donde tuvieron la oportunidad de conocer de cerca el funcionamiento de la Casa de todos los ecuatorianos.
Las niñas y niños vivieron una experiencia única a través de un recorrido guiado, que les permitió acercarse al quehacer legislativo y comprender la importancia de la participación ciudadana en la construcción de nuestro país.
Estamos convencidos de que una Asamblea abierta al pueblo debe fomentar la educación cívica y fortalecer el compromiso de las nuevas generaciones, porque ellos representan el futuro del Ecuador.
Luis Fernando Jácome nació en Quito el 9 de abril de 1990. Oriundo de la parroquia de Alangasí, asambleísta por la provincia de Pichincha, representante de las 33 parroquias rurales. A lo largo de su vida, ha dedicado su trabajo y compromiso a recorrer cada parroquia rural, caminando junto a amigos y vecinos que, como él, sueñan con un cambio positivo y real para sus comunidades. Su vocación política surgió de forma natural, impulsada por su cercanía con la gente y su profundo deseo de servir.
Desde joven se destacó como promotor de juventudes y gestor cultural, liderando proyectos innovadores como la primera radio online en parroquias rurales, que abrió un espacio para visibilizar las tradiciones y la voz de sectores históricamente olvidados.
Comprometido con su gente, ha desarrollado una labor social constante, entregando víveres y brindando apoyo a personas mayores y familias en situación de vulnerabilidad. Incluso durante la pandemia de COVID-19, intensificó este compromiso, coordinando la distribución de alimentos, medicinas y kits de desinfección para quienes más lo necesitaban.
Mientras cursaba sus estudios en Derecho, retomó con fuerza su vocación política, manteniéndose siempre cercano a la realidad de las parroquias rurales. Gracias a esa trayectoria y al respaldo de la ciudadanía, fue electo asambleísta.
Dentro de su parroquia y en otras localidades es reconocido por su trabajo para rescatar y fortalecer las manifestaciones culturales, participando activamente en festividades y representando a su parroquia incluso fuera del Distrito Metropolitano de Quito. Aunque no todos sus proyectos se concretaron, su dedicación constante refleja un compromiso firme con la identidad cultural y el desarrollo social.
Hoy, como legislador, mantiene intacta la misión que lo impulsó desde el inicio: construir un Ecuador más justo, solidario e inclusivo, dando voz y esperanza a quienes durante años han permanecido al margen.