El 10 de marzo de 2025, en la Sesión N.° 101 de la Comisión de Transparencia, Participación Ciudadana y Control Social, abordamos una problemática alarmante: el incumplimiento del programa de becas “Futuro Femenino 2024”, una situación que ha dejado a cientos de médicos posgradistas en incertidumbre y sin el financiamiento que el Estado les prometió. Lo que se suponía que sería un apoyo para su formación académica se ha convertido en una carga económica que muchos no pueden sostener.
Durante la sesión, escuchamos a dos Comisiones Generales que expusieron la magnitud del problema. La Dra. Giovanna Franchesca Ortega Vera, estudiante del Posgrado en Medicina Familiar y Comunitaria, explicó que, aunque superó el proceso de selección en agosto de 2024, aún no ha recibido el apoyo económico necesario para continuar con su formación. La falta de financiamiento ha obligado a muchos becarios a endeudarse o, en algunos casos, a dejar sus empleos para cumplir con los exigentes requisitos del programa. Lo más preocupante es que, si esta situación no se soluciona pronto, varios estudiantes se verán obligados a suspender sus estudios, lo que afectará directamente la atención médica en el país.
A esto se suma lo expuesto por Alejandra Carolina Cantuña Corrales, abogada de los médicos posgradistas, quien denunció que, tras solicitar información a la PUCE, la Senescyt y el Ministerio de Salud Pública, recibió una respuesta que genera aún más incertidumbre: oficialmente, las becas no existen. Es decir, el programa fue anunciado, los médicos posgradistas fueron seleccionados y han cumplido con todas las condiciones, pero las autoridades no reconocen la existencia del beneficio. Esto no solo es un atropello a los derechos de los becarios, sino una clara falta de transparencia por parte del Gobierno.
Desde la Comisión, no podemos permitir que el Estado juegue con las expectativas y los sueños de profesionales que han decidido especializarse para servir a la ciudadanía. La crisis en el sistema de salud es evidente, y necesitamos más médicos preparados, no menos. Como presidente de la Comisión, dejé en claro que este problema no solo afecta a los profesionales involucrados, sino que tiene un impacto directo en la calidad de la atención médica que recibe la población.
En este contexto, el asambleísta Franklin Samaniego presentó documentos que demuestran que hubo una asignación previa de becas, pero que no se ha cumplido con el proceso de desembolso. Ante esta evidencia, Carmen Tiupul propuso la elaboración de un informe detallado sobre la situación de los becarios afectados, mientras que Mariana Yumbay cuestionó las decisiones del Ejecutivo, señalando que este incumplimiento representa una vulneración de derechos y un retroceso en las oportunidades de formación profesional.
Ante esta realidad, reafirmamos nuestro compromiso con la fiscalización de los recursos destinados a la educación y la salud pública. No permitiremos que esta situación pase desapercibida, y seguiremos exigiendo respuestas concretas por parte del Gobierno para garantizar que los médicos posgradistas reciban el apoyo que se les prometió. El país no puede permitirse perder a profesionales altamente capacitados por el incumplimiento de las instituciones que deberían respaldarlos.