¡Venir a trabajar en Imbabura me llena de orgullo! Esta hermosa provincia ecuatoriana es un ejemplo de diversidad y riqueza cultural, y un lugar donde la gente es muy trabajadora y comprometida con su tierra.
Imbabura es hogar de múltiples culturas, incluyendo comunidades indígenas y mestizas, quienes han forjado, con el paso de los años, una identidad única y diversa. Este mosaico cultural se refleja en sus tradiciones, su gastronomía, su música y, sobre todo, en su gente.
La gente de Imbabura es conocida por su tesón y empeño en el trabajo. Su espíritu emprendedor y su dedicación al desarrollo de su provincia son fuentes de inspiración para todos nosotros. Trabajar en Imbabura nos recuerda la importancia de valorar y respetar nuestras raíces y la diversidad cultural que nos enriquece como país.
En Imbabura estamos trabajando en la nueva Ley de Comunas, un proyecto que busca fortalecer el desarrollo comunitario y garantizar la participación ciudadana en la toma de decisiones. Esta ley es fundamental para asegurar que las comunidades puedan gestionar sus recursos y sus territorios de manera autónoma y sostenible, respetando sus tradiciones y formas de vida.
Como asambleísta, me siento honrada de poder contribuir al desarrollo y bienestar de esta maravillosa provincia. Estoy comprometida en trabajar en proyectos y leyes que promuevan la equidad, la inclusión y el respeto a las múltiples culturas que conviven en Imbabura y en todo el Ecuador.
Soy Victoria Desintonio, Asambleísta por la provincia del Guayas, de la Bancada Ciudadana. Soy defensora de los derechos de la mujer y sus reivindicaciones. Busco la generación de oportunidades para todos y todas. Tengo treinta y cinco años, mi compañero de vida es John y soy madre de Ezequiel y Rafael. Desde joven, decidí luchar por la eliminación de las causas de la desigualdad y la injusticia
A los diecisiete años me vincule al Movimiento Jubileo 2000. Participé en el impulso a proyectos de formación sobre el tema de la deuda, en la construcción de normativas para el control del endeudamiento público y veedurías, y en el impulso de iniciativas de vigilancia ciudadana a la deuda externa ecuatoriana.
He participado intensamente en el movimiento de mujeres, donde he compartido nuestras luchas por los derechos humanos. Me vinculé al proceso de la Asamblea Constituyente de 2008, en particular en la creación del Mandato Juvenil Constituyente, desde el Acuerdo Nacional de Jóvenes. Ese momento marcó mi vida, pude valorar desde la realidad, la importancia de la participación. Esta iniciativa ciudadana, plasmó los anhelos y demandas de jóvenes ecuatorianos en la nueva Constitución, que siento mía.
Fui consejera del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, designación que obtuve a través del voto popular.
Fui asambleísta desde mayo de 2021, hasta la disolución de la Asamblea por muerte cruzada en mayo de 2023. En la Asamblea, propuse la derogatoria de la mal llamada Ley Humanitaria, que precarizó el trabajo de miles de ecuatorianos y ecuatorianas.
Vuelvo a la Asamblea Nacional para construir ese Ecuador que represente igualdad y equidad para todos y todas.
