En el seno de la Comisión de Garantías Constitucionales, Derechos Humanos, Derechos Colectivos y la Interculturalidad de la Asamblea Nacional, hemos estado en el centro de un importante debate que busca dar visibilidad y reconocimiento a nuestros diversos pueblos y nacionalidades a través del Nuevo Código de Comunas.
Nuestro inteŕes es encontrar soluciones adecuadas y justas para nuestras comunidades, visibilizar a los pueblos y nacionalidades. Esta discusión no se trata solo de leyes, sino de un compromiso profundo con la inclusión y el respeto a la diversidad cultural y étnica que enriquece nuestro país.
Debatimos el Informe para el primer debate que pasará en el PLeno de la Asamblea Nacional Esta etapa es crucial, ya que marca el inicio de un proceso legislativo que podría tener un impacto significativo en la vida de nuestras comunidades.
La necesidad es armonizar las legítimas aspiraciones de los pueblos y Comunidades con la constitución que nos dimos en Montecristi. Este proceso busca fortalecer los principios constitucionales, al asegurar que todos los ciudadanos sean tratados con igualdad y respeto.
Este debate sobre el Nuevo Código de Comunas es un paso importante hacia una sociedad más inclusiva y justa. Estamos frente a un esfuerzo por reconocer y valorar la diversidad de las comunidades, para construir un futuro de inclusión.
Soy Victoria Desintonio, Asambleísta por la provincia del Guayas, de la Bancada Ciudadana. Soy defensora de los derechos de la mujer y sus reivindicaciones. Busco la generación de oportunidades para todos y todas. Tengo treinta y cinco años, mi compañero de vida es John y soy madre de Ezequiel y Rafael. Desde joven, decidí luchar por la eliminación de las causas de la desigualdad y la injusticia
A los diecisiete años me vincule al Movimiento Jubileo 2000. Participé en el impulso a proyectos de formación sobre el tema de la deuda, en la construcción de normativas para el control del endeudamiento público y veedurías, y en el impulso de iniciativas de vigilancia ciudadana a la deuda externa ecuatoriana.
He participado intensamente en el movimiento de mujeres, donde he compartido nuestras luchas por los derechos humanos. Me vinculé al proceso de la Asamblea Constituyente de 2008, en particular en la creación del Mandato Juvenil Constituyente, desde el Acuerdo Nacional de Jóvenes. Ese momento marcó mi vida, pude valorar desde la realidad, la importancia de la participación. Esta iniciativa ciudadana, plasmó los anhelos y demandas de jóvenes ecuatorianos en la nueva Constitución, que siento mía.
Fui consejera del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, designación que obtuve a través del voto popular.
Fui asambleísta desde mayo de 2021, hasta la disolución de la Asamblea por muerte cruzada en mayo de 2023. En la Asamblea, propuse la derogatoria de la mal llamada Ley Humanitaria, que precarizó el trabajo de miles de ecuatorianos y ecuatorianas.
Vuelvo a la Asamblea Nacional para construir ese Ecuador que represente igualdad y equidad para todos y todas.