El documento busca generar equidad eliminando las brechas remunerativas en el sector salarial.
Existe una alta inequidad en la distribución primaria y secundaria de los ingresos en el Ecuador. Es necesario implementar reformas que corrijan directamente este problema dado que afecta a la estabilidad y el crecimiento económicos
Las reformas planteadas en el proyecto de ley que limitan las brechas remunerativas podrían generar un ciclo virtuoso e incrementar los salarios más bajos de un segmento de los asalariados.
Un margen importante de la población, el 51.5%, no tienen acceso a seguridad social (lo cual incluye a la población que realiza el trabajo del hogar no remunerado, los empleados domésticos sin seguro, trabajadores independientes sin seguro y asalariados que no aportan a la seguridad social).
El caso del reconocimiento del trabajo doméstico no remunerado, supone un cambio de paradigma puesto que el concepto que se maneja actualmente proviene desde el neoliberalismo mismo que solo le reconoce valor al trabajo mercantil. No obstante, la propuesta se basa en el principio de que el trabajo no remunerado del hogar es socialmente útil y lo que se busca es evitar la dependencia económica en la vejez reconociendo la labor productiva con fines sociales de este colectivo.
Este nuevo concepto reconoce el trabajo no mercantil que no recibe un ingreso pero aporta significativamente a la sociedad y que representa el 15% del PIB del país. El quiebre conceptual pasa por la definición del trabajo no remunerado del hogar y por su reconocimiento como un trabajo socialmente útil que aporta al desarrollo social y productivo a la economía al país como agregado social.
Se han realizado estudios actuariales para garantizar la sostenibilidad de la propuesta. Para estos cálculos, han implementado supuestos en relación a la inflación que permite hacer los cálculos actuariales, la tasa de interés nominal y el salario básico unificado, manteniendo estimaciones bastante conservadoras para tratar de determinarlo con el mayor grado de precisión.
Es importante recalcar que esta es una propuesta sostenible que piensa a futuro y lo condiciona para garantizar el acceso a una pensión que dignifique la vejez de este colectivo, históricamente olvidado.
El trabajo no remunerado que se realiza en los hogares, ha sido asignado tradicionalmente a las mujeres, in visibilizado por la sociedad y muchas veces por las propias familias.