Martes 8 de Octubre
HOY 10:00 El australiano Nick Vujicic, quien carece de extremidades, recibirá un reconocimiento en el Salón de la Ciudad del Municipio.
La seguridad lo rodeaba. Varios guardias lo escoltaban, flashes de cámaras digitales y de televisión se reflejaban en su rostro y las autoridades de Guayaquil lo esperaban para declararlo huésped de honor. Nicholas Vujicic no es un artista de cine, ni cantante ni político, pero su figura es mundialmente conocida por su fe, optimismo y valor, propagados tanto como su historia. Nick, motivador australiano, padece desde que nació el síndrome de treta-amelia, caracterizado por la carencia de extremidades. Pero su condición física no le ha impedido ser feliz y llevar un mensaje de fortaleza a ciudadanos del mundo. El pasado martes, Nick llegó a Guayaquil y fue declarado huésped de honor por el alcalde Jaime Nebot, en una ceremonia que se realizó en el Salón de la Ciudad, donde se dieron cita personas con distintas discapacidades, físicas e intelectuales. Ahí, los aplausos no se hicieron esperar a su llegada al salón. Durante su intervención hubo hasta lágrimas. Todos se conmovieron por sus palabras, incluso desde que empezó su disertación: “Mi única discapacidad es no hablar español”. Luego prosiguió en su idioma natal, el inglés. Sus palabras fueron entendidas por el auditorio con la ayuda de un traductor. “Yo traté de cometer suicidio a los 10 (años) y estoy aquí... Sin Dios no podemos hacer lo imposible, sin Dios no tenemos paz”, refirió Nick, de 31 años. Nick está en gira por Sudamérica. Ahora está en Perú pero el lunes pasado visitó Quito, donde tuvo un acercamiento con el presidente Rafael Correa. En Guayaquil, Nick no dio entrevistas a medios. A pocos minutos de irse, aclaró que tenía que acudir inmediatamente a una conferencia en el coliseo Voltaire Paladines Polo y en la noche, en el estadio Capwell. En el Cabildo, Nick provocó otro momento conmovedor al estrechar en un abrazo a María Cristina Kronfle, de MG-PSC. Acomodó su cabeza en el cuello de ella y la funcionaria le correspondió con la misma acción, pues luego de unos minutos aclaró que su condición no le permite levantar los brazos. Poco antes del mediodía, Nick se alistaba para irse. No fue mayor problema que llegara al vehículo que lo esperaba en los bajos del Cabildo. Había un intenso movimiento en el lugar y quienes no sabían de su visita, preguntaban quién era. “Es un hombre que sin pies ni brazos tiene algo que nosotros no: valor y fe”, le explicó una comunicadora a una ciudadana.
Podemos tener sabiduría como hombre, y yo sé que es una capacidad muy limitada comparada con la sabiduría de Dios; y cuando trato de soñar grande mi propia capacidad no se compara para nada con el sueño que Dios tiene para mí”. Nick Vujicic, motivador australiano.