Fui invitado por el alcalde del cantón Eloy Alfaro, Alí Corozo, al recinto Canchimalero, que está ubicado en la zona norte de la provincia de Esmeraldas, en el cantón Eloy Alfaro, cuya cabecera cantonal es Valdez, mejor conocida como Limones.
Un recinto famoso por tener los manglares más altos del mundo y por su aire puro.
Donde cada 3 de noviembre se conmemora al SANTO NEGRO / San Martín de Porres, un santo originario de Perú conocido como patrono de la justicia social, quien hizo el milagro de salvar a una mujer colona, que naufragó. Y así se originó la festividad afrorreligiosa más grande e importante de Latinoamérica.
La celebración comienza en Limones, desde ahí parten la gabarra y 12 lanchas provenientes de distintas comunidades.
En la embarcación principal van el Santo, las autoridades civiles, eclesiásticas. Cada embarcación constituye un espectáculo, pues para decorarlas no se escatima alegría ni buen gusto y durante el viaje de Limones a Canchimalero los invitados a la celebración no dejan de entonar cánticos y arrullo para el Santo Negro.
Los fieles no llegan con las manos vacías, pues le llevan al Santo generosas y vistosas ofrendas que contienen productos como cacao, plátanos, mariscos, cañas, naranjas y piñas. También, más allá de lo material y visible, hay elementos que no se ven, pero se sienten con fuerza, con la devoción de los asistentes, a su fe inquebrantable en lo que ha de venir y a los corazones llenos de gratitud por los milagros recibidos.
Después de la procesión acuática, viene la misa que, obviamente, es pura alegría, el encargado de oficiar la es monseñor, luego viene el baile y diversión en la playa.
En el festejo nadie está triste, solo hay algarabía, a la festividad llegan turistas nacionales e internacionales.
Se estima que se dan cita al rededor de 2.000 personas.
Tampoco hay que dejar de lado las delicias que se pueden experimentar en Canchimalero: ceviche, encocado de pescado, guanta, sango de todas las posibilidades inimaginables qué se preparan en la provincia de Esmeraldas.