Hoy, en la Sesión No. 73 de la Comisión de Garantías Constitucionales, abordamos un tema de vital importancia para la transparencia y el buen manejo de nuestros recursos: el proceso de fiscalización sobre las presuntas irregularidades en la Refinería de Esmeraldas. Esta sesión marca un paso crucial en nuestra labor de garantizar que las instituciones del Estado actúen de manera responsable y eficiente, siempre velando por los intereses del pueblo ecuatoriano.
La Refinería de Esmeraldas es un activo estratégico para el país, y su correcta administración es esencial para el bienestar económico y social de todos. Es por eso que, como miembros de la Comisión de Garantías Constitucionales, tenemos la obligación de investigar cualquier irregularidad que pueda estar afectando su funcionamiento. Nuestro objetivo es esclarecer los hechos y asegurarnos de que los recursos públicos se utilicen de manera adecuada y en beneficio de los ciudadanos.
Durante esta sesión, tuvimos la oportunidad de escuchar comparecencias clave de actores relevantes en este proceso. Las intervenciones fueron fundamentales para entender mejor la magnitud de los posibles problemas y las acciones necesarias para corregirlos. En estos momentos de fiscalización, es esencial contar con la colaboración de todos los involucrados para llegar a la verdad y tomar las decisiones que correspondan.
Como asambleísta, mi compromiso con la transparencia y la rendición de cuentas es firme. Creo que solo a través de una fiscalización exhaustiva y objetiva podemos construir una democracia más sólida y confiable. La Refinería de Esmeraldas es solo uno de los muchos casos que debemos investigar y seguir de cerca para asegurar que el manejo de los recursos del Estado sea siempre adecuado.
Finalmente, invito a todos los ciudadanos a seguir de cerca esta y otras sesiones importantes de la Comisión de Garantías Constitucionales. La transparencia es un derecho de todos, y es nuestra responsabilidad como asambleístas garantizar que se haga justicia. Continuaremos trabajando para que los ecuatorianos tengan la seguridad de que sus recursos están siendo utilizados de manera correcta y en su beneficio.