El 8 de septiembre se difundieron acusaciones falsas en mi contra, que buscan desinformar y confundir a la ciudadanía. Frente a esto, quiero ser claro: siempre he apoyado a las organizaciones que trabajan por el bien del país, dentro del marco de la ley y la transparencia.
Lo que rechazo de manera frontal es que fondos ilegales o intereses oscuros pretendan influir en la política nacional. Ecuador necesita líderes coherentes, no actores que vivan del conflicto o la mentira.
Mientras los mismos políticos de siempre se dedican a engañar, nosotros seguimos trabajando por un Nuevo Ecuador, y por una Amazonía más unida, digna y fuerte.
La verdad siempre prevalece cuando se trabaja con principios.