A nombre de la Asamblea Nacional, el legislador Sebastián Palacios, exaltó a Quito por sus 484 años de fundación. Remembró lugares emblemáticos de la ciudad capital, monumentos, iglesias, plazas, leyendas e historia que son cuna de la bohemia quiteña. Lugar donde surgieron pintores, escritores y poetas del siglo XX. Donde hasta hoy se puede intercambiar miradas con artistas, dijo.
Es una ciudad vibrante, llena de miradores – muchos de ellos naturales. El Rucu Pichincha, las lomas del Itchimbia, el Panecillo. Lugares donde cada amanecer es diferente. Donde algunos días la neblina los tapa y, en varias ocasiones, el sol los ilumina en medio de un cielo azulado. Somos los quiteños, aferrados a nuestras tradiciones y convicciones. Nos gusta lo nuestro y lo compartimos con propios y extraños. Nos gustan también los retos, cambiar, evolucionar. Nos reinventamos todos los días, y la ciudad también, agregó.
Se refirió a los próceres que iniciaron la Revolución de Quito con el Primer Grito de Independencia, así como aquellos que derramaron su sangre en las faldas del Pichincha, el 24 de mayo de 1822. Y eso lo guardamos los quiteños siempre en la memoria. Lo revivimos en cada manifestación, en cada marcha, en cada concentración, añadió Sebastián Palacios.
Patrimonio Cultural de la Humanidad, donde lo colonial y lo moderno se juntan. Ciudad solidaria con el resto del país, con los que más lo necesitan. Donde día a día trabajamos por la inclusión de los más vulnerables. Que busca ser un espacio libre de discriminación, exclusión y violencia. Que lucha por el respeto a la vida, por sus animales, por el deporte. Ciudad que quiere ser activa, solidaria, equitativa. Donde nadie se quede atrás. Un lugar de encuentro, de mezcla y de integración de las diferencias, de la diversidad, donde día a día queremos acortar la brecha de la desigualdad.
Hoy, en sus 484 años de Fundación, el mejor homenaje que le podemos hacer a Quito es estar a la altura de sus ideales: ser demócratas, ser trabajadores, ser solidarios, ser honestos. Quito se merece, de todos nosotros, que nos esforcemos día a día para ser consecuentes con su gran historia; Como ciudadanos libres, autónomos y enamorados de esta ciudad, Quito, la capital de los ecuatorianos. Con un ¡Viva Quito! Concluyó su saludo.
JLVN/ds
