La Comisión de Soberanía y Relaciones Internacionales recibió al exembajador de Ecuador en Washington, Francisco Carrión, quien ofreció detalles sobre su renuncia y la falta de una normativa bilateral para los sobrevuelos de vigilancia aeromarítima en Ecuador.
Respecto al primer tema, Carrión sostuvo que la renuncia la presentó el pasado 6 de enero al presidente de la República, Lenín Moreno. Posteriormente emitió un comunicado en el que expuso su posición al respecto, con el fin de esclarecer la verdad y evitar especulaciones.
En referencia al segundo punto, indicó que no se opone a la cooperación de Estados Unidos para la lucha contra el narcotráfico en el país, tampoco a los operativos de vigilancia aeromarítima en territorio nacional; lo que no es posible, señaló, es la inexistencia un convenio internacional para llevar adelante dichos procesos y se los quiera realizar a través de autorizaciones administrativas e invocando acuerdos generales.
Relaciones bilaterales
En su comparecencia, el exembajador hizo referencia al fortalecimiento de las relaciones bilaterales entre ambos países, habló de visitas oficiales, como la del vicepresidente Mike Pence a Ecuador y de Mike Pompeo, secretario de Estado de EE.UU.
Así también, destacó logros comerciales y de inversiones. En ese sentido, citó la Reunión del Consejo de Comercio e Inversiones, marco que regula promueve y alienta el comercio bilateral sin el cual no es posible el cambio de bienes y servicios entre dos países.
Aeropuerto
Además, comentó sobre la pista de aterrizaje en San Cristóbal-Galápagos y de un cruce de memorandos respecto al sobrevuelo de aviones estadounidenses en territorio ecuatoriano, sin que haya un convenio bilateral. Dijo que él solicito, en repetidas ocasiones, información sobre la existencia de un instrumento bilateral suscrito para el efecto, sin embargo, la respuesta se dilataba.
Debate
Una vez terminada su intervención surgieron las inquietudes de los asambleístas, entre ellas, preguntaron si es necesario establecer un convenio bilateral para los sobrevuelos entre Ecuador y EE.UU, si hay violación a la soberanía por la inexistencia de dicho acuerdo, si existen convenios específicos sobre la lucha contra el narcotráfico, si hay una flagrante ruptura a la Constitución.
El exembajador Carrión enfatizó que es fundamental que exista un marco normativo, vinculante y específico que establezca los límites, alcances de cooperación, así como el funcionamiento de las actividades operativas, en cuyas aeronáves debería intervenir personal ecuatoriano de Fuerzas Armadas, Fiscalía y Policía. Aclaró que no se atrevería a decir que ha habido violación a la soberanía, además que no se opone a la participación de Estados Unidos en la lucha al narcotráfico.
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