El asambleísta Marlon Cadena presentó un proyecto de reformas al Código Orgánico Integral Penal, como una herramienta para garantizar la paz social, el orden y la seguridad sin afectar la dignidad del ser humano.
El parlamentario en su propuesta señala que es importante respetar el principio de la proporcionalidad que constituye una garantía interpretativa a favor de los derechos humanos que responde a criterios de adecuación, coherencia, necesidad, equilibrio y beneficio entre el fin lícitamente perseguido y los bienes jurídicos potencialmente afectados o intervenidos, de modo que sean compatibles con las normas constitucionales.
Detalla que el principio de proporcionalidad, la gravedad de la pena o de la medida de seguridad debe corresponder a la gravedad del hecho cometido o con la peligrosidad del sujeto respectivamente.
Recordó que dentro del ámbito de las contravenciones de tránsito el Ecuador ha optado por un sistema de sanciones incongruentes con el principio de la “non bis in idem”, por cuanto conlleva sanciones de carácter penal y administrativas dentro del mismo Código Orgánico Integral Penal, cuestión que se espera corregir con este proyecto.
Además señala que la propia Constitución determina que la privación de la libertad no será la regla general y se aplicará para garantizar la comparecencia del imputado o acusado al proceso, el derecho de la víctima del delito a una justicia pronta, oportuna y sin dilaciones y que las medidas no privativas de libertad se aplicarán de conformidad con los casos, plazos, condiciones y requisitos establecidos en la ley.
También afirma que es obligación de la Asamblea Nacional la constante revisión, actualización en todo aquello que conlleve la protección y la restricción de los derechos que se afectan con las conductas punibles, actividad jurídico intelectual, que debe ser examinada, actualizada, supervisada desde todas las perspectivas sociales posibles, desde el punto de vista o perspectiva de las víctimas, del delito y las conductas punibles.
PV