El asambleísta Salvador Quishpe presentó el proyecto de reformas a la Ley de Minería que prohíbe, sin excepciones, la minería metálica en fuentes de agua, ecosistemas frágiles, áreas naturales protegidas (subsistema estatal, autónomo descentralizado, comunitario) y zonas de amortiguamiento, corredores ecológicos de conectividad y bosques protectores y hábitats que albergan especies endémicas y en peligro de extinción.
El legislador afirmó que las comunidades, pueblos y nacionalidades como guardianes del agua exigen la prohibición de las actividades mineras metálicas en territorios ancestrales, zonas de patrimonio cultural y otras zonas de importancia estratégica para el desarrollo de la vida silvestre.
El parlamentario enfatizó que la consulta previa, libre, informada y vinculante es un derecho contemplado en la Carta Magna y en la jurisprudencia desarrollada por la Corte Constitucional, por lo que no se debe autorizar la prospección minera sin la consulta previa o ambiental, a la vez enfatizó que actualmente la participación de los pueblos es limitada.
Indicó en la necesidad de determinar obligaciones puntuales que incluyan financiar y mantener a perpetuidad las instalaciones construidas, para contener daños permanentes como los relaves mineros. Expresó que en caso de no hacer esta clarificación, se estaría generando un riesgo social, ambiental y financiero para el Ecuador.
Finalmente, Salvador Quishpe informó que las empresas dedicadas a la minería metálica manifiestan que usan la mejor tecnología con métodos para reutilización del agua de los ríos, pero que en realidad los proyectos mineros a gran escala como Mirador en Zamora Chinchipe se ve todo lo contrario.
HC/pv
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