Garantizar la igualdad de remuneración y cualquier forma de retribución económica entre hombres y mujeres en el desempeño de un mismo trabajo o para un trabajo de igual valor, sin discriminación por razones de sexo o género, es lo que busca el proyecto de Ley Orgánica para la Igualdad Salarial entre Hombres y Mujeres, que este miércoles, el Pleno de la Asamblea Nacional aprobó por unanimidad. El documento irá en las próximas horas al Ejecutivo para su respectiva sanción u objeción.
En el afán de atender varias problemáticas derivadas del trato discriminatorio en el goce de remuneraciones, la propuesta de Ley desarrolla temáticas como la brecha salarial, marco regulatorio y la desigualdad remunerativa entre hombres y mujeres.
La finalidad es erradicar prácticas discriminatorias en el ámbito laboral para reducir la brecha por motivos de género, a través del respeto a la igualdad en todo tipo de remuneración expresó Marcela Holguín, proponente y ponente del proyecto, tras recalcar que quieren dar respuesta a las trabajadoras del país que buscan tener igual remuneración si realizan el mismo trabajo.
Además, recalcó que el objetivo es evitar y eliminar la discriminación; exigir al igual trabajo igual salario; un ley justa y reparadora para las trabajadoras del país, ya que las mujeres ganan el 20% menos que los hombres haciendo el mismo trabajo.
Esta es una Ley sencilla que resuelve un problema complejo, ordena al Estado a través del Ministerio de Trabajo a garantizar igualdad salarial, señaló Dallyana Passailaigue, “es momento que con responsabilidad y urgencia trabajemos para reducir en algo ese tiempo y lograr que las próximas generaciones gocen de derechos; no existe posibilidad de progreso si las mujeres no somos partes del proceso; por una igualdad real”, resaltó.
Su articulado determina que todo empleador público o privado está obligado a remunerar de forma igualitaria a todos sus servidores, trabajadores u obrero, sin discriminación de género, por el mismo trabajo realizado o de igual valor.
El trabajador, obrero y servidor público podrán exigir el respeto de su derecho a la igualdad de remuneración, a través de denuncia a la Unidad de Talento Humano o quien haga sus veces en la Administración Pública; y, en el caso de los trabajadores del sector privado, ante el órgano rector de la política laboral, exigiéndose que las resoluciones emitidas en cada caso sean debidamente motivadas.
Juan Pablo Molina Saldaña, asambleísta electo por la provincia del Guayas, miembro de la Bancada Ciudadana. Soy economista de profesión y amante del agro, tengo 38 años de edad, papá de Juan Pablo, José Joaquín, María Joaquina y Juana Valentina, familia formada gracias a mi compañera de vida Rossana.
Defensor de causas sociales pero, sobretodo, de causas que beneficien a personas con discapacidad, con quienes guardo una particular afinidad ya que conozco de cerca sus realidades.
Economista con énfasis en economía empresarial por la Universidad Tecnológica Ecotec, con menciones en Gestión Financiera, Gestión Empresarial y Negocios Internacionales. Maestrante en Gerencia Política, Gobernanza y Gobernabilidad por la Universidad Católica Santiago de Guayaquil.
Fui parte del Ministerio de desarrollo Urbano y Vivienda (MIDUVI) impulsando el programa habitacional Socio Vivienda además del Sistema de Información para la Gobernabilidad Democrática (SIGOB)
Fiel creyente de que un país más equitativo y justo para todos es posible. Mi lucha desde el legislativo es salvaguardar los derechos de los ecuatorianos, de sobremanera los de aquellos a quienes les vulneran sus derechos. Además, impulsar acciones y proyectos que propicien el óptimo desarrollo de nuestro país y sociedad.
Mantengo firme mi compromiso de lograr juntos el país libre que tanto anhelamos.