Hoy estamos aquí para exaltar la trayectoria de un ecuatoriano que ha llevado el nombre de nuestro país a lo más alto en el ámbito de la música clásica a nivel internacional. Me refiero al maestro Patricio Aizaga Villacís, un artista que ha dedicado su vida al desarrollo de la música sinfónica y ha sido un embajador de la cultura del Ecuador en los escenarios más prestigiosos del mundo. Pero sobre todo, un hombre cuya labor ha transformado la vida de cientos de niños y jóvenes ecuatorianos. El maestro Aizaga no solo ha dirigido orquestas de renombre en cuatro continentes, o con su batuta ha acompañado también a grandes solistas como Joshua Bell o ha dirigido en escenarios emblemáticos como la sede de la UNESCO en París, sino que también ha trabajado incansablemente por la formación de nuevas generaciones de músicos ecuatorianos, consolidando a la Orquesta Filarmónica del Ecuador y a la Fundación Orquesta Sinfónica Juvenil como los pilares fundamentales de nuestra cultura musical. Ha logrado lo que pocos pueden, elevar los estándares de la excelencia musical en nuestro país, mientras brinda oportunidades a niños y a jóvenes talentosos, muchos de ellos provenientes de sectores vulnerables. Estos niños y jóvenes, a través de la música, han encontrado el camino para salir adelante, desarrollando sus talentos y logrando abrir puertas hacia un mundo mejor, desarrollando sus talentos y logrando abrir puertas hacia un mundo mejor. Un espacio donde el talento y la pasión superan las barreras de las desigualdades. Gracias a su visión y esfuerzo, Ecuador cuenta hoy con una plataforma de excelencia musical que no solo nos llena de orgullo, sino que también proyecta nuestras capacidades culturales al mundo entero. Es por todo esto que la Asamblea Nacional se enorgullece de otorgar al maestro Patricio Aizaga la condecoración Asamblea Nacional de la República del Ecuador, Doctor Vicente Rocafuerte, al mérito cultural. Este reconocimiento no solo celebra los logros artísticos, sino también su invaluable contribución a la construcción de una sociedad más justa e inclusiva, donde cada joven, sin importar su origen, pueda alcanzar sus sueños y metas. Patricio Aizaga, muchas gracias maestro por su dedicación y pasión, son un faro de inspiración para todos nosotros.
Gracias por elevar la cultura ecuatoriana y por brindar a tantos niños y jóvenes la oportunidad de transformar sus vidas a través de la música y el arte.
Muchas gracias.
Quiteña, doctora en Psicología Industrial y Magister en Gerencia y Liderazgo Educacional. Poseo una sólida carrera de 20 años como docente universitaria y 15 años de experiencia en Gestión de Talento Humano en el sector privado, aportaré una perspectiva única a la Asamblea Nacional como representante electa por Pichincha, circunscripción Centro-Norte, parte de la Comisión Permanente de Derecho al Trabajo y Seguridad Social.