El día de hoy tuve el honor de compartir un espacio de diálogo y aprendizaje en la Universidad Politécnica Salesiana, donde tuve la oportunidad de socializar las reformas al Código Orgánico de Organización Territorial, Autonomía y Descentralización (COOTAD) con docentes y estudiantes. Este encuentro fue más que un simple intercambio de ideas; fue un momento de conexión profunda con una comunidad académica comprometida y consciente de las necesidades urgentes de nuestra sociedad.
Me siento profundamente gratificada al ver el entusiasmo y la sensibilidad de los jóvenes hacia los desafíos que enfrentamos como país. Es inspirador ver cómo sus ganas de participar y su sed de conocimiento se transforman en una poderosa fuente de energía que me impulsa a seguir adelante en la tarea de transformar nuestras leyes en beneficio de quienes más lo necesitan. Estos espacios de diálogo con la academia no solo enriquecen el proceso legislativo, sino que también fortalecen los lazos entre la teoría y la práctica, entre el saber académico y la realidad de nuestros territorios.
Agradezco sinceramente el compromiso y el entusiasmo de cada uno de los participantes. Su valiosa colaboración en este trabajo conjunto es fundamental para asegurar que las reformas al COOTAD respondan a las aspiraciones y necesidades de todas y todos en los territorios. Este es solo el comienzo de un proceso en el que seguiremos trabajando mano a mano con estudiantes y docentes, recogiendo sus observaciones y propuestas para construir un COOTAD inclusivo y justo.
Volveremos a reunirnos para continuar este diálogo constructivo, convencidos de que la participación activa de la comunidad académica es clave para alcanzar un desarrollo territorial equitativo y sostenible. Estoy comprometida en seguir impulsando esta colaboración con la academia, para que juntos logremos leyes que verdaderamente reflejen las realidades y aspiraciones de nuestra gente.
¡Gracias a la Universidad Politécnica Salesiana por abrir sus puertas y ser parte de este importante proceso de transformación! Seguiremos trabajando con la misma pasión y dedicación, siempre al servicio de nuestra comunidad.
Soy Victoria Desintonio, Asambleísta por la provincia del Guayas, de la Bancada Ciudadana. Soy defensora de los derechos de la mujer y sus reivindicaciones. Busco la generación de oportunidades para todos y todas. Tengo treinta y cinco años, mi compañero de vida es John y soy madre de Ezequiel y Rafael. Desde joven, decidí luchar por la eliminación de las causas de la desigualdad y la injusticia
A los diecisiete años me vincule al Movimiento Jubileo 2000. Participé en el impulso a proyectos de formación sobre el tema de la deuda, en la construcción de normativas para el control del endeudamiento público y veedurías, y en el impulso de iniciativas de vigilancia ciudadana a la deuda externa ecuatoriana.
He participado intensamente en el movimiento de mujeres, donde he compartido nuestras luchas por los derechos humanos. Me vinculé al proceso de la Asamblea Constituyente de 2008, en particular en la creación del Mandato Juvenil Constituyente, desde el Acuerdo Nacional de Jóvenes. Ese momento marcó mi vida, pude valorar desde la realidad, la importancia de la participación. Esta iniciativa ciudadana, plasmó los anhelos y demandas de jóvenes ecuatorianos en la nueva Constitución, que siento mía.
Fui consejera del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, designación que obtuve a través del voto popular.
Fui asambleísta desde mayo de 2021, hasta la disolución de la Asamblea por muerte cruzada en mayo de 2023. En la Asamblea, propuse la derogatoria de la mal llamada Ley Humanitaria, que precarizó el trabajo de miles de ecuatorianos y ecuatorianas.
Vuelvo a la Asamblea Nacional para construir ese Ecuador que represente igualdad y equidad para todos y todas.