En las instalaciones de la Sociedad de Lucha Contra el Cáncer del Ecuador (Solca) Guayaquil, expertos, especialistas y médicos oncólogos de Ecuador y Chile dieron sus criterios respecto a los proyectos de ley unificados para la prevención, detección y atención del cáncer cérvico-uterino, así como para la prevención, diagnóstico, tratamiento y control del cáncer en general en el Ecuador, que actualmente analiza la Comisión de Salud en primer debate.
El presidente de la Comisión, Juan José Reyes, reafirmó su compromiso con una fiscalización activa y un enfoque humano en salud.
El presidente de Solca Guayaquil, José Jouvín Vernaza, subrayó que Solca es un aliado estratégico de todas las instituciones relacionadas con la salud, al contar con los mejores oncólogos del país. Expresó su total disposición para brindar asesoría en la construcción de la ley.
Por su parte, el director médico de Solca y cirujano oncólogo, Guido Panchana, propuso establecer un marco normativo integral para la atención oncológica, con un enfoque técnico que evite discrecionalidades, basado en criterios de especialistas. Además, destacó la importancia de mantener el Registro Nacional de Tumores con la participación de los hospitales. Señaló que el Comité Nacional del Cáncer es clave para asegurar una gestión técnica y articulada y que Solca debe ser el asesor directo del Ministerio de Salud Pública en todo lo relacionado con patologías oncológicas.
Panchana presentó cifras sobre la trayectoria de trabajo de Solca y alertó que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre el 80 % y el 90 % de los cánceres son prevenibles. Añadió que la prevalencia de la enfermedad va en aumento: “En el año 2020 realizamos 2.800 cirugías, y en 2024, más de 7.000. Esa es la magnitud del crecimiento de Solca para atender la creciente demanda oncológica”. Además, citó datos de Globocan que proyectan un aumento de los casos de cáncer en Ecuador, pasando de 30 mil nuevos casos a 53 mil en 2045.
De manera virtual, el Ph.D. Emilio Santalices Cueva, exministro de Salud de Chile, compartió la experiencia de su país en la implementación del Plan Nacional de Cáncer y la Ley de Cáncer. Como ejes prioritarios de intervención, sugirió: identificar la magnitud y urgencia del problema; involucrar a toda la sociedad; definir políticas de Estado; fortalecer las instituciones encargadas de la ejecución; y promover la colaboración público-privada.
“El cáncer es un desafío regional. En América Latina se estima un incremento del 70 % en los casos durante los próximos 20 años. No es un problema solo de Ecuador, requiere acción inmediata”, enfatizó, e hizo un llamado a trabajar de manera mancomunada y a aportar desde cada sector, pues se requieren grandes inversiones y acciones rápidas con programas preventivos amplios.
En la misma línea, el doctor Sergio Becerra, oncólogo radioterapeuta desde Chile, señaló que la política implementada en su país puede servir como referencia para Ecuador. Destacó la importancia de contar con un programa de salud pública diseñado para reducir el número de casos y muertes por cáncer y mejorar la calidad de vida de los pacientes, a través de estrategias basadas en evidencia para la prevención, detección precoz, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación.
Legisladores como Victoria Desintonio, Diana Blacio, Annabella Azín y Andrés Guzhmer coincidieron en la urgencia de mejorar el sistema de salud, invertir en prevención, educación sexual, vacunación y acceso a datos clínicos integrados. La sesión concluyó con el compromiso de integrar todos estos aportes en la construcción de una ley robusta contra el cáncer en Ecuador.
RSA