Previo a la elaboración del Informe para el primer debate del proyecto de Ley Orgánica Reformatoria a Varias Leyes para Garantizar el Derecho a la Protección Prioritaria de la Mujer en el Período de Maternidad, la Comisión del Derecho al Trabajo y la Seguridad Social recibió a dos expertas en derecho constitucional laboral, quienes destacaron la importancia de esta iniciativa.
La doctora Ximena Ron, PhD, subrayó que la garantía de derechos durante el período de maternidad, especialmente, cuando la mujer ha perdido a su hijo, es sine qua non en cumplimiento de la sentencia constitucional. Recordó que las mujeres embarazadas deben recibir atención prioritaria y especializada, tanto en su recuperación física como emocional, y destacó que la propuesta de ley busca garantizar el autocuidado que requiere la mujer más allá del hecho de la maternidad.
Explicó que actualmente, la licencia por muerte de un hijo durante el embarazo se considera dentro de la licencia por maternidad, por lo que es necesario asegurar no solo el cuidado del recién nacido, sino también el de la mujer, en especial de las servidoras públicas.
Asimismo, sugirió analizar la posibilidad de ampliar el período de licencia por paternidad, con el fin de evitar la discriminación laboral hacia las mujeres, reducir las restricciones de empleo y equilibrar las responsabilidades familiares entre ambos padres.
Por su parte, la magíster Daniela Erazo tras recordar que las normas constitucionales son de aplicación obligatoria señaló que el marco legal vigente garantiza los derechos de las mujeres y la obligación del Estado de prevenir la discriminación y promover un trato equitativo.
Erazo recomendó considerar el duelo gestacional, proceso que enfrentan los padres que han perdido a su bebé, muchas veces en silencio. Explicó que este duelo puede darse no solo tras el nacimiento, sino también durante el embarazo, y que no se encuentra desarrollado en ningún cuerpo legal. Agregó que actualmente la licencia otorgada se considera médica, sin tomar en cuenta el dolor emocional que atraviesan los padres.
Sostuvo que la licencia de 12 semanas también debería aplicarse para los padres, pues ellos igualmente sufren la pérdida de sus hijos. Explicó que el posparto es un período en el cual la mujer necesita cuidados para su recuperación, ya que puede presentar depresión y otros efectos, no solo físicos sino también psicológicos.
Por último, sugirió incluir en el informe la opinión consultiva que establece que el derecho al cuidado es un derecho autónomo vinculado a la dignidad humana, así como incorporar una disposición transitoria que contemple la capacitación sobre este derecho en las instituciones públicas.
Los legisladores coincidieron en la necesidad de plasmar una norma que proteja tanto a la madre como al padre cuando la mujer se encuentra en proceso de gestación y se produce la pérdida del hijo. Además, propusieron que el proyecto contemple los casos de interrupción voluntaria del embarazo, adopción y cuidado de niños prematuros, para que los padres puedan acompañar de manera integral estos procesos.
RSA