Más 300 representantes de distintas organizaciones sociales, barrios, colectivos, mujeres, grupos de migrantes, retornados y personas en condición de movilidad, así como delegados de diversas instancias estatales, colmaron el salón José Mejía Lequerica, de la Asamblea Nacional, a propósito del Taller Nacional de Fomento de la Participación Ciudadana e Inclusión: Retos y Desafíos, organizado por la Comisión Especializada 11, que preside Dora Aguirre Hidalgo.
Precisamente, la legisladora Aguirre, al dar la bienvenida a los asistentes, destacó que este taller busca informar, promover y evaluar el nivel de participación y el involucramiento de la sociedad, en forma individual y colectiva, para incidir en las decisiones de lo público, de manera que las organizaciones sociales estén al tanto de las resoluciones que se adoptan, tanto en lo local, cuanto en el ámbito nacional.
Recordó la importancia de realizar un trabajo mancomunado entre la sociedad, las instancias estatales y de gobierno, así como los representantes de elección popular, para empoderar a la ciudadanía de los derechos de participación.
Democracia es participación
La primera vicepresidenta de la Asamblea Nacional, Rosana Alvarado, en su mensaje, resaltó la importancia de la participación para la consolidación de la democracia. “Para Ecuador la democracia es imposible sin la participación ciudadana”, subrayó, al destacar que el buen vivir es un proceso de construcción colectiva, puesto que hemos transformado espacios de subordinación en espacios de liberalización.
Ejercicio de capacitación cívica
De su lado, el presidente del Consejo Nacional Electoral, Juan Pablo Pozo Bahamonde, enfatizó que en el nuevo modelo de Estado se reconoció la existencia de la Función Electoral, con dos organismos (el Consejo y el Tribunal Contencioso) y se le otorgó una nueva competencia, que es la capacitación cívica, con visión de inclusión e interculturalidad, con lo cual es factible desarrollar procesos que permitan a la ciudadanía conocer las tres formas de democracia existentes: la participativa, la representativa y la democracia comunitaria.
La Constitución recoge luchas históricas
Entre tanto, Fernando Cedeño, presidente del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, relievó el carácter garantista de la actual Constitución, que es producto de la participación activa de la ciudadanía en Montecristi. “Esta Constitución tiene una gran fortaleza, porque recoge años de luchas sociales, que vienen desde la Revolución Liberal; luego, la Revolución Juliana; las demandas del movimiento estudiantil de los años 50; el resurgimiento de la lucha obrera de los años 80; y, el levantamiento indígena de los años 90. Hoy, continuó, el reto es empoderarnos de nuestros derechos.
El ser humano sobre el capital
La presidenta de la Asamblea Nacional, Gabriela Rivadeneira, al inaugurar el Taller Nacional de Fomento de la Participación Ciudadana e Inclusión: Retos y Desafíos, aseguró que el mandato de Montecristi de poner al ser humano sobre el capital, cambió muchas cosas en Ecuador y, con base en esos cambios, la Asamblea ha dictado leyes que cristalizan los derechos consagrados en la Carta Suprema, a la vez que destacó los beneficios de la Ley de Justicia Laboral y Reconocimiento del Trabajo en el Hogar, que recoge la concepción por la cual trabajo es toda actividad que realiza el ser humano.
Tras felicitar a la Comisión de Participación Ciudadana por la organización de este encuentro, recordó a los concurrentes que la participación es fundamental para avanzar en el proceso revolucionario.
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