La seguridad social de las mujeres y de los excluidos será la prioridad de la Asamblea Nacional, dijo el presidente de la Función Legislativa, Fernando Cordero, al precisar que más del 50% de la población femenina realiza trabajos no remunerados y carece de esta protección, por lo que insistió en la necesidad de trabajar en una reforma integral e intergeneracional que permita cubrir las necesidades de todos los grupos sociales, es decir, plasmar lo que la Constitución establece respecto de la universalización de la seguridad social.Este mensaje lo expuso el Titular de la Legislatura durante el seminario internacional “Economía del cuidado y seguridad social para personas que realizan trabajo no remunerado, que se realiza en el Hotel Quito, organizado por el Grupo Parlamentario por los Derechos de las Mujeres.
Cordero precisó que estos encuentros permiten recoger las experiencias de otros países, así como los insumos y propuestas de la gente, pues la participación ciudadana es de vital importancia en la construcción de consensos para la aprobación de las leyes que ayudarán a solucionar los problemas de la ciudadanía.
Hay que debatir este tema desde el contexto del IESS y los cambios globales totales y urgentes que necesita la seguridad social. No hay que pensar en normativas parches, sino realizar un diagnóstico adecuado de todos los cambios que deben hacerse, pues las leyes no solo deben servir para recoger aspiraciones de grupos sociales sino para viabilizar una seguridad social íntegra, agregó.
No basta tener conciencia y compromiso político. Es necesario el respaldo social, capaz de sostener los cambios en esta materia, que no van a ser fáciles, dijo Cordero al señalar que, si queremos que se triplique el número de afiliados en los próximos tres años, que significa una carga económica para el Estado, se requieren reformas estructurales cuyos resultados posiblemente no los veremos las generaciones actuales, manifestó.
Afirmó que al momento existen trabajos no remunerados (amas de casa) y “por lo menos tenemos que protegerlas, tiene que haber una compensación, una protección desde el Estado, desde la seguridad social”.
No creo que haya personas que se opongan a este desafío de la seguridad social para todos sin excepción y el gran reto del Grupo Parlamentario de Mujeres, de los sectores interesados en estas reformas y de la Asamblea Nacional es dar forma a las propuestas para plasmarlas en realidades, porque el desafío es que cinco de cinco ciudadanos tengan cobertura social y no uno de cada cinco. Hay que ver a la salud y a la seguridad social como elementos complementarios, convergentes, de todo el conjunto de la sociedad y no de un organismo en particular, subrayó.
Soy una de las personas que piensan que cuando las leyes se hacen con la gente y para la gente, las leyes son buenas, concluyó.
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