Parlamentarios de diversas bancadas dieron sus aportes al Proyecto de Ley de Sanidad Agropecuaria. Consideran de vital importancia la aprobación de la normativa, porque permitirá garantizar la soberanía alimentaria de los ecuatorianos.
Mencionaron que al aplicar medidas fito y zoosanitarias con base en los principios técnico-científicos para la protección y mejoramiento de la sanidad animal y vegetal, y el aseguramiento de los productos agropecuarios, se prevendrá el establecimiento de plagas y enfermedades, además que apoya al sector rural.
La legisladora Irma Gómez, sugirió que se excluya del control a las parcelas de los campesinos, especialmente productores de maíz, porque la hibridación de la semilla se hace de manera natural. Pidió incluir una transitoria donde se establezca el plazo de un año para que los campesinos y pequeños productores puedan adecuar sus sistemas productivos a las disposiciones de esta ley.
Betty Carrillo, al destacar la importancia de la normativa, sugirió el cambio de denominación del proyecto por Ley de Sanidad Animal, Vegetal e Inocuidad Alimentaria. Propuso que se incluya en los fines de esta norma, la investigación científica en temas de bienestar animal. Dijo que es necesario que la autoridad rectora tome en cuenta la investigación, promoción, control y buenas prácticas de bienestar animal en la cadena de producción de cárnicos y que todo centro dedicado a la producción de cárnicos cuente con cámaras para el correcto manejo y control por parte de la autoridad competente.
Mientras que la asambleísta Rosa Elvira Muñoz, señaló que el Proyecto de Ley responde a inquietudes que se presentaron cuando se socializaron leyes como la de Recursos Hídricos, de Tierras Rurales y de Semillas. Agregó que la propuesta legal protege a los productores pequeños y grandes, así como a consumidores. Dijo que la asistencia técnica tiene que ser constante en las comunidades, en favor de los criadores de ganado.
El presidente de la Comisión de Soberanía Alimentaria, Miguel Carvajal, mencionó que es fundamental el manejo de la cadena productiva para garantizar el bienestar animal. Planteó que se considere que vía reglamento se fijen estándares para el buen manejo zootécnico relacionados con el bienestar animal y que en el Consejo Consultivo se incluya la participación de organizaciones que representan a los consumidores.
La legisladora Angélica Andino, agradeció a la Comisión por recoger el régimen especial que caracteriza a la provincia de Galápagos, de acuerdo con el artículo 258 de la Constitución, que se basará en la planificación y su desarrollo, con apego al ecosistema que caracteriza a esta zona del país.
Virgilio Hernández pidió que se revise el artículo 14 del Proyecto, a fin de que los Gobiernos Autónomos Descentralizados participen dentro del sistema nacional de control con la respectiva representación de los gobiernos municipales y provinciales; se permita a las prefecturas contar con sus propios laboratorios para brindar servicio a las comunidades de las zonas rurales; que las campañas de vacunación a animales se realice en coordinación con los gobiernos autónomos provinciales y municipales y que se repotencie el faenamiento artesanal.
El parlamentario José Torres, mencionó que el gobierno debe considerar un sistema de comercialización pública para evitar la especulación. Sobre el faenamiento y crianza de animales para consumo humano, señaló la importancia de mirar prácticas extranjeras para garantizar el consumo de alta calidad y buen precio, pues la soberanía alimentaria es la base fundamental de los pueblos.
María Augusta Calle, recordó que por norma constitucional Ecuador es un país libre de semillas y cultivos transgénicos, disposición que se la debe considerar en el contenido de la ley. Sugirió que los laboratorios oficiales y acreditados tengan un nivel de acreditación por parte del organismo rector en materia fitosanitaria y que estén coordinados con del sistema de educación superior.
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