William Garzón, presidente de la Comisión del Derecho a la Salud, escuchó a los representantes de las organizaciones del Sistema de Naciones Unidas en torno al proyecto de Código de Salud, previo a la elaboración del informe para segundo debate.
Gina Tambirini, de la Organización Panamericana y Mundial de la Salud, ratificó la definición de los derechos a la salud, no solo como el acceso a la atención y curación sino a la promoción, prevención y el abordaje de los terminantes sociales. Aguas seguras, suministros adecuados, alimentos saludables, nutrición, vivienda en óptimas condiciones, acceso a educación y los insumos necesarios para la salud sexual y reproductiva, son aspectos que aspira sean considerados dentro de la normativa.
Del Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa), Lola Valladares, resaltó que el Ecuador ha tenido grandes avances en materia constitucional al reconocer los derechos sexuales y reproductivos y también a nivel de política pública, avances que aspira sean recogidos en el texto que se trabaja.
Pidió reforzar la normativa en temas como la mortalidad materna, el embarazo en adolescentes y la violencia basada en género, que si bien rigen en la Ley vigente necesitan tener un tratamiento más amplio. También que se dedique un capítulo a los derechos de las mujeres en el parto humanizado y también salud integral para las mujeres que sufren violencia intrafamiliar.
Nidya Pesantes, de ONU Mujeres, sugirió incorporar disposiciones sobre la violencia de género, que es un problema de salud pública y, por tanto, le corresponde atender a la Autoridad Sanitaria para prevenir que las mujeres sean víctimas de violencia.
La alimentación saludable que debe ser considerada para promover y facilitar políticas en todo el ciclo de vida, con énfasis en los buenos hábitos en la primera infancia y adolescencia que es cuando se puede cambiar la cultura de los pueblos, señaló Marisol Ruilova, consultora de salud y nutrición de Unicef, quien propuso que el etiquetado de alimentos se suba a la categoría de ley.
Garzón destacó la importancia de escuchar los aportes en la construcción de un código que tiene un solo objetivo: garantizar la salud y el bienestar de los ecuatorianos. Lo importante es llegar a consensos en beneficio de todos, dijo finalmente.
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