Con el propósito de evidenciar la realidad social de la nacionalidad waorani, Juan Enomenga, presidente de la comuna Miwaguno, en conjunto con otros voceros de Tobeta, Yawepare y Nampaweno, ubicadas en Dayuma, provincia de Orellana, visitaron la Asamblea Nacional.
José Serrano Salgado, presidente de la Legislatura, recibió a los representantes y se comprometió a conformar una delegación que emprendería una visita in situ a la provincia para dar repuestas a la problemática social y económica.
El dirigente expuso la difícil situación que viven las comunas debido, entre otras causas, a la falta de fuentes de empleo. Solicitan la donación de víveres por un período de seis meses hasta emprender un proyecto productivo.
En esta misma línea, señaló la ausencia de proyectos productivos e incumplimiento de competencias del gobierno local. De ahí que demandan la intervención de las carteras de Estado, organismos internacionales y fundaciones privadas, para solventar las necesidades de alimentación, vivienda, educación y salud de los habitantes.
Se trata de un hecho paradójico, en tanto que en el territorio ancestral bautizado como Parque Nacional Yasuní opera la empresa petrolera china Petro Oriental. “Esta empresa no nos quiere dar trabajo”, señaló.
Enomenga resaltó que estas comunas son las últimas en establecer contacto voluntario con la sociedad. En el documento que proporcionaron al Titular del Parlamento se precisa que antes del aislamiento la nacionalidad waorani poseía otro estilo de vida, distante del paradigma occidental.
“Vivíamos bien, porque nuestro alimento era de la selva”. Sin embargo, explica que los habitantes implementaron nuevos productos a su dieta alimenticia como sal, azúcar, arroz. Además, sostiene que los niños y niñas asisten a establecimientos educativos con la necesidad de adquirir útiles escolares.
El vocero congratuló la acción legislativa de puertas abiertas. “Aplaudimos la bienvenida y la apertura para escuchar nuestros requerimientos por parte del Presidente de la Asamblea”, precisó. Mientras que tres madres de familia le entregaron una ofrenda artesanal como símbolo de gratitud.
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