La presencia de asambleístas mujeres en la Función Legislativa del Ecuador es una muestra objetiva de que se está avanzando cualitativamente en la marcha ascendente por la equidad de género, resaltó la Primera Vicepresidenta de la Asamblea Nacional, Irina Cabezas, al hacer un reconocimiento a la mujer ecuatoriana por su aporte permanente al crecimiento y desarrollo del país.Irina Cabezas al manifestar que cada vez se evidencia de mejor manera el rol que le corresponde a la mujer; no en el papel de compañera del hombre, sino en el de constructora de la sociedad, recalcó que la construcción social no es problema de género sino de conciencia.
Dijo que hoy vivimos tiempos de liberación, de derechos y de justicia, con una Constitución que con el impulso participativo del pueblo, es un marco jurídico preponderante para la efectiva aplicación de derechos y garantías.
Sostuvo que las mujeres tienen un mundo por ganar, pues se está creando una legislación social avanzada, progresista, democrática, recogiendo el pensamiento y la obra de Manuelita Sáenz, Dolores Cacuango, Tránsito Amaguaña y Nela Martínez, mujeres convencidas de su papel trascendente en los cambios sociales.
Afirmó que la “legislación que hoy cobija nuestros derechos tiene en las simientes la palabra, la vida y la obra de Matilde Hidalgo de Prócel, es decir, el marco jurídico que levantamos emblemáticamente, viene cargado de una lucha histórica, firme y denodada, impulsada por lideresas con destino de victoria”.
Indicó que “la Patria no puede hacerse sin el contingente de las mujeres, por eso corresponde subirse sobre los hombros de la historia para mirar en lontananza a las obreras de la nueva sociedad que estamos obligadas a construir junto al hombre, pues esa sociedad de justicia social será el resultado de la conjunción ideológica y política de hombres y mujeres revestidos de valores y de principios, con la decisión firme de que se tornen irreversibles en el decurso del progreso social”.
Al saludar a las mujeres asambleístas, con oportunidad del Día Internacional de la Mujer, señaló que están dando un aporte a la construcción de los cambios que la Patria requiere, a la vez que les exhortó a continuar sembrando honestidad, responsabilidad y que irriguen con capacidad el trabajado diario.
“Somos herederas de las luchas de las heroínas que nos precedieron, pero hoy estamos llamadas a participar en renovados combates contra el atraso, la miseria y la pobreza”, insistió al enfatizar que desplegarán la bandera de la equidad, para que hombres y mujeres, unan conciencias y voluntades, cerebros y corazones para construir una sociedad de justicia, de progreso, en un país altivo y soberano.
Advirtió que el tema de la violencia de la mujer sigue latente, ante lo cual ratificó su compromiso de continuar trabajando día a día desde la Asamblea: “Vivimos en una nueva era, no de dar dádivas sino de entregar lo que por derecho nos corresponde”, concluyó.
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