Un régimen legal que permita el ejercicio del pleno derecho a la salud es lo que pretende el Código Orgánico de Salud, cuyo segundo debate inició este martes, 6 de mayo. Aquí se resaltó la amplia participación ciudadana, a través de gremios, instituciones y autoridades, lo cual permitió construir un marco legal adecuado y necesario de alta especialización que prevea una nueva institucionalidad y organización del sector.
El proyecto será debatido y aprobado en tres partes, considerando que está estructurado en libros. En primer lugar, el título preliminar, (del artículo1 al 33); y, el Libro 1, que se refiere al Sistema Nacional de Salud (34-108); en segundo lugar, el Libro II, que trata sobre el cuidado integral de la salud (109-354); y, por último, el Libro III, sobre el Régimen de Control y Sanción en el Sistema Nacional de Salud (355- al 405), disposiciones generales, transitorias, reformatorias y derogatorias.
Esta fue la propuesta formulada por William Garzón, presidente de la Comisión del Derecho a la Salud, quien calificó a esta normativa como el Código más importante de los últimos 50 años.
Al saludar la presencia de ciudadanos que han sido parte de la construcción del Código subrayó que el proyecto fortalece las capacidades de la Autoridad Sanitaria Nacional y reorganiza el financiamiento del Sistema Nacional de Salud, de modo que garantiza el respeto a los fondos de la Seguridad Social en este ámbito. Además, robustece las normas relativas a la conformación de la Red Pública Integral de Salud y al Modelo de Atención Integral de Salud, aplicando de manera concreta las disposiciones constitucionales.
El Código pretende transformar el sistema de salud, incluye un modelo de gestión en salud basado en atención primaria y determina que la rectoría asignada a la Autoridad Sanitaria Nacional, le corresponde al Ministerio rector de la salud pública. También, establece la promoción de la salud (educación, información, alimentación saludable y lactancia materna) y la prevención de enfermedades transmisibles, no transmisibles y vacunas; prevención de desastres, atención prehospitalaria y medidas preventivas del cuidado de la salud, cuidados de cáncer, salud sexual y reproductiva.
Respaldo ciudadano
El Pleno recibió en comisión general a varios actores, quienes respaldaron la propuesta de Ley. Joaquín González, coordinador residente encargado del Sistema de Naciones Unidas en Ecuador, aseguró que realizan un acompañamiento al avance del proyecto de Código, en el cumplimiento de la Agenda 2030. Enfatizó que la norma incorpora temas de vanguardia que promueven el derecho a la salud, como la protección de la salud infantil y consideraciones sobre el cuidado de la confidencialidad médica en todos sus aspectos.
Entre tanto, Gina Watson, representante de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), resaltó el amplio proceso de socialización de la normativa que busca fortalecer el marco legal y el compromiso del Estado de garantizar el pleno derecho a la salud previsto en la Constitución. Para los organismos internacionales de salud el inicio de este segundo debate representa un hito muy importante, no solo por el avance que representa para el país, sino porque aporta a las Américas y al compromiso social sostenible de la región.
De su lado Sixto Cuesta, miembro del directorio de la Sociedad de Lucha contra el Cáncer (Solca), recordó que la institución participó en el análisis del proyecto, con la presentación de criterios, muchos de los cuales constan en el informe para segundo debate. Planteó que para conservar la vida de los pacientes oncológicos, se devuelva a este organismo la capacidad de adquirir medicamentos fuera del cuadro de medicamentos básicos. Mientras, Wilson Merino, de la Red Nacional Acuerdo contra el Cáncer, subrayó que el país demanda un abordaje humano e integral de esta enfermedad, que afecta a cientos de miles de familias ecuatorianas.
Desde la Asociación de Importadores y Distribuidores de Productos Médicos, Cristina Murgueitio, afirmó que este Código es importante para precautelar la salud de los ecuatorianos. Sugirió diferenciar en la legislación los medicamentos de los dispositivos médicos.
Igualmente, José Pérez, gerente de Amazonian Group, explicó la importancia de saber las propiedades medicinales del cannabis y aclaró que no es un producto psicoactivo, más bien, tiene características paliativas, por lo que no contiene elementos nocivos. Este medicamento contiene propiedades que se pueden aprovechar en el sistema de salud, dijo.
A criterio de James Cárdenas, de Sarman Medicinal Industries, la investigación del cannabis medicinal se inicio hace 50 años y, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), anualmente fallecen siete millones de personas por el consumo del tabaco. “Ecuador tiene las condiciones naturales ideales para la producción de nuevas especies de cannabis destinado a mejorar la calidad de vida de personas que padecen dolencias y enfermedades”, enfatizó. Con esta opinión coincidió Luis Cunuhay, profesional en medio ambiente, quien expresó que el cannabis es la mejor propuesta para compensar la grave deforestación por papel al ser una planta apta para la remediación de suelos.
Isabel Martínez, profesora de salud, relató que ha sido testigo de dramas humanos, pacientes con dolores profundos, daños hepáticos y renales que generan ingentes gastos y frente a ello está el cannabis como opción saludable paliativa, barata y sin efectos tóxicos. Finalmente, Gabriel Buitrón, especialista en políticas públicas para la prevención de drogas, recordó que más de 50 mil personas requieren medicamentos para el dolor y que el sistema de salud, tanto público, cuanto privado, solo cubre el 25 % de esta demanda.
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