La Comisión de Desarrollo Económico recibió a las autoridades del Ministerio de Turismo, quienes expusieron las propuestas de reforma a la actual Ley de Turismo. Este trabajo, que lleva la mesa legislativa presidida por el asambleísta Daniel Noboa, se realiza como parte de la articulación de funciones entre el Ejecutivo y Legislativo.
Mateo Estrella, asesor del ministro Niels Olsen, señaló que entre los cambios se plantea la creación de una Agencia de Promoción Turística del Ecuador (Promotur Ecuador). Esta entidad busca gestionar la Marca País, así como campañas nacionales e internacionales de turismo.
También se propone el Registro Nacional de Turismo, con el fin de viabilizar la legalización de promotores del sector. El objetivo es que el turista nacional y extranjero sepa cuáles son los negocios que están catastrados en el país.
Además, esta nueva agencia destinará hasta el 20% de sus ingresos a proyectos de desarrollo en el ámbito de la digitalización de destinos, la competitividad y el clima de negocios. Estrella afirmó que la propuesta formal del Ejecutivo se entregará en noviembre a la Asamblea Nacional.
El asambleísta John Vinueza solicitó a las autoridades de Gobierno que las políticas públicas se creen desde lo local y no solo con una visión nacional.
La viceministra de Turismo, Ana García, detalló que el modelo de turismo en Ecuador es descentralizado y que los cantones y provincias desarrollan planificación turística desde sus localidades, mientras que el Ministerio solamente agrega valor.
Por su arte, el asambleísta Francisco Jiménez señaló que es importante contar con una Ley de Turismo que tenga una sinergia entre el sector público y privado. A criterio de la asambleísta Nathalie Arias, estos temas son fundamentales, ya que permiten articular tanto la industria turística como el sector comunitario. Felicitó la iniciativa de contar con Códigos de Turistas, con lo que Ecuador se sumaría a otros países, en donde ya rigen estos protocolos.
La asambleísta Wilma Andrade agregó que las reformas legales son necesarias, ya que la ley vigente resulta “caduca” con “reformas parches” frente las necesidades actuales del sector turístico.
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