Queremos ir hacia el cambio de la matriz productiva, dijeron representantes de la Coordinadora de Movimientos y Organizaciones Sociales, quienes acudieron a la Comisión de Desarrollo Económico para solicitar que desde este espacio legislativo se impulse la radicalización de la revolución agraria, la suspensión de los juicios coactivos que mantienen con el Banco Nacional de Fomento; que el Estado subsidie la deuda campesina mediante el refinanciamiento o renovación del capital de 3 hasta 10 años plazo, dependiendo del monto de cada deuda con el BNF y la CFN.
El asambleísta Rodrigo Collaguazo, quien solicitó que la Comisión de Desarrollo Económico reciba a este grupo de ciudadanos, recordó que mediante la expedición de los decretos ejecutivos 246 y 317 del 8 de febrero y del 8 de abril de 2010 se establecieron las declaratorias de estado de excepción a favor del sector agropecuario, debido al calentamiento global del planeta, causante de las sequías, inundaciones, deslaves, granizadas, plagas y enfermedades principalmente como: caracoles, cinta blanca, amarilla, mosquilla, langosta, gusano del suelo, chinche de la espiga, entre otros factores negativos causaron y causan pérdidas irrecuperables en la calidad y los rendimientos de la producción de arroz hasta en un 80%.
Abel Navas, en representación del sector campesino, indicó que el monto del capital a refinanciarse es de 24´ 810.000 dólares y el promedio de la deuda de capital es de 4.962 dólares. El subsidio permitirá rehabilitar a 4 000 pequeños y medianos productores de arroz, la generación de 40 mil puestos de trabajo anuales, así como la rehabilitación de 1 000 pequeños y medianos productores de maíz, con y la generación de 30 mil puestos de trabajo temporales, agregó.
Solicitó establecer una normativa para impulsar la revolución agraria, la transformación del Banco Nacional de Fomento en Banco de Desarrollo Rural, la capacitación del talento humano en el agro, la investigación científica, capacitación agropecuaria, contable y transferencia de tecnología, crédito productivo de corto, mediano y largo plazo, con tasas de interés del 5% anual, el fomento a la agroindustria rural, planes de comercialización a nivel interno y externo, la construcción y reconstrucción de la red vial rural; así como establecer una alianza entre el Estado y las organizaciones del agro para impulsar el cambio de matriz productiva y la revolución agraria.
El presidente de la Comisión de Desarrollo Económico, Juan Carlos Cassinelli, precisó que no puede existir un cambio de la matriz productiva sin una visión innovadora en el tratamiento del agro, caso contrario estaríamos descuidando a los productores primarios, a quienes precisamente debemos darles herramientas para su reactivación.
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