El Pleno de la Asamblea Nacional exaltó la valía y el esfuerzo de la doctora Paulina Aulestia Enríquez al coronar el Everest y convertirse en la primera mujer ecuatoriana en llegar a la cumbre más alta del mundo, colmando de gloria y satisfacción a la comunidad ecuatoriana.
La presidenta de la Legislatura, Gabriela Rivadeneira, le impuso la condecoración Asamblea Nacional de la República del Ecuador, doctora Matilde Hidalgo de Prócel, al mérito deportivo.
Paulina Aulestia Enríquez quien es oriunda de la ciudad de Quito, se ha destacado como montañista profesional de alto rendimiento, consagrándose como la primera ecuatoriana en ascender a la cumbre más alta del mundo, logro alcanzado el 21 de mayo de 2013.
En el Acuerdo Legislativo también se considera que siendo deportista con notable rendimiento en la ascensión de montañas a nivel nacional e internacional, dentro del proyecto “Primera Ecuatoriana en las Siete Cumbres”, ha proyectado una preparación identificada por su gran sentido de disciplina, intenso entrenamiento y potenciales cualidades físicas, que han posibilitado emprender en un deporte extremo, venciendo obstáculos y riesgos que su práctica implica y concretando agotadoras jornadas, en las que ha enarbolado con orgullo el tricolor nacional, otorgando renombre al deporte ecuatoriano.
Su motivadora hazaña ha conjugado esfuerzos y voluntades, con el firme objetivo de cumplir, con tenacidad y perseverancia, una exigente campaña deportiva, a la que ha sumado un permanente interés para transmitir sus conocimientos y habilidades con alto sentido y visión social, consolidando una propuesta integradora de recursos y competencias reconocidas por la comunidad, que la posiciona como un alto referente de talento y emprendimiento.
La asambleísta Ximena Ponce destacó que es un justo homenaje a Paulina, en el que sus logros se han visto al ascender a las siete cumbres seguidas, al destacar que Everest tiene una altura de 8 848 metros.
Dijo que Paulina es una deportista con notable rendimiento de montañas y ha proyectado una preparación identificada por su gran sentido de disciplina, intenso entrenamiento y potenciales cualidades físicas que han posibilitado emprender en un deporte extremo, venciendo obstáculos y riesgos que su práctica implica y concentrando agotadoras jornadas en las que ella ha enarbolado con orgullo la tricolor nacional otorgando renombre al deporte ecuatoriano.
A su vez, Paulina Aulestia al recibir el reconocimiento a nombre de todas las mujeres ecuatorianas y de la memoria de Nela Martínez, mujer luchadora e intelectual de la Patria, comentó que concluir el proyecto de las siete cumbres, las más alta de cada continente, y haber alcanzado la cumbre del monte Everest, es una forma más de representar la fuerza de la mujer ecuatoriana.
Indicó que hoy asume la responsabilidad de transmitir a los niños, niñas, jóvenes y adultos los valores positivos que la montaña le ha enseñado, como la solidaridad, el respeto, el liderazgo, la comunicación, la integridad, entre otros.
Agradeció el apoyo del Presidente de la República y de todas las entidades que hicieron posible este sueño y sobre todo a su familia e invocó a Dios por haberle dado el talento de escalar montaña, ser sensible a su mensaje y ser un instrumento para glorificar su nombre.
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